El presidente de Estados Unidos invitó a su par de Brasil para cenar a su casa de Florida. El domingo se firmará un acuerdo de defensa militar.
El presidente estadounidense, Donald Trump, elogió a su par de Brasil, Jair Bolsonaro, por la gestión que lleva adelante en su país y remarcó que la amistad entre ambos » es probablemente más fuerte ahora que nunca», durante una cena que ambos compartieron en la residencia del primero, en Florida.
«Él ha hecho un trabajo fantástico, fantástico. Brasil lo ama y Estados Unidos lo ama», expresó exultante Trump a los periodistas que aguardaron en la puerta del domicilio de residencia de Mar-a-Lago ubicada en la ciudad de Palm Beach.
Mientras lo señalaba a Bolsonaro con su dedo índico derecho, remarcó: «Nuestra amistad es probablemente más fuerte ahora que nunca».
Ambos mandatarios se dieron la mano y se retiraron a cenar, donde compartieron mesa con autoridades brasileñas, entre ellos el ministro de Defensa, Fernando de Azevedo e Silva.
Por su parte, el brasileño decidió no expresar palabras ante la prensa, en lo que marcó el inicio de una gira de este mandatario por Estados Unidos, en donde tiene previsto visitar el domingo el Comando Sur estadounidense, en la ciudad de Doral, vecina a Miami, donde firmará con el almirante Craig Faller un acuerdo bilateral de defensa.
Mientras se encuentra en Estados Unidos, Bolsonaro pidió a sus partidarios que salgan a las calles el 15 de marzo para participar de las manifestaciones en su apoyo, a pesar de que las mismas han sido calificadas de antidemocráticas por sus detractores.
«No es un movimiento contra el Congreso o el Poder Judicial, es un movimiento pro-Brasil», afirmó el jefe de Estado en Boa Vista (norte), donde hizo una escala antes de ir a Florida.
«Es un movimiento que quiere mostrarnos a todos, al Ejecutivo, el Legislativo y el poder Judicial, que es la población la que da la dirección que debe tomar el país», insistió.
Hace 15 días, causó revuelo al compartir un video en Whatsapp que, según los medios, llamaba a manifestarse el 15 de marzo a su favor y criticaba al Congreso y al Legislativo.
Los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados expresaron su indignación, así como varios jueces de la Corte Suprema.