La secretaria de Acceso a la Salud de la Nación se refirió así a la donación que el país recibió de 170.000 kits de test serológicos que fueron «validados por el Instituto Malbrán y el Conicet, que nos dijo que la IGG tenía un 80 % de sensibilidad».
La secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, rechazó esta noche que los test rápidos utilizados para el estudio de diagnóstico en el marco de la pandemia de Covid-19 sean defectuosos y agregó que su porcentaje de sensibilidad es «muy bueno», por lo cual «es muy importante dar la información correcta y no generar dudas o desconfianza en la población».
La funcionaria expresó al canal de noticias C5N que el país recibió una donación de 170.000 kits de test serológicos que fueron «validados por el Instituto Malbrán y el Conicet, que nos dijo que la IGG tenía un 80 % de sensibilidad, lo cual es muy bueno en los test rápidos. Así, se hizo el testeo de anticuerpos que no tenía ningún fin de diagnostico sino de investigación».
«Si antes de empezar sé que la sensibilidad del test es del 80% es incorrecto decir que es defectuoso; 80% de sensibilidad es muy alta para un test serológico rápido y por eso siempre dijimos que los test serológicos son para investigación y este es un estudio de investigación epidemiológico, que nos va a dar un resultado que es una foto de cuántos tuvieron contacto con el virus en el país, pero no son un test de diagnóstico. Es una herramienta más para saber el panorama que tenemos».
Vizzoti también expresó que se debe buscar que el pico de la pandemia del nuevo coronavirus sea en el país «lo más bajo y lo más tarde posible».
«Tenemos que buscar que nuestro pico sea lo más bajo y lo más tarde posible y va a depender de cómo administremos el aislamiento y reanudemos las actividades», dijo Vizzotti esta noche al canal de noticias C5N.
«Sabremos cuál es el pico cuando empiece a bajar la curva y diremos que el pico ya pasó», agregó la funcionaria, según quien no hay una fecha precisa sobre cuándo llegará ese momento, aunque estimó que «el panorama de mayor expectativa es con este frío».
Si aprendimos en estos 50 días de aislamiento a usar el barbijo, mantener el distanciamiento social, entonces es posible que nos vaya mejor y no veamos acá lo que pasó en otros países”
«Si aprendimos en estos 50 días de aislamiento a usar el barbijo, mantener el distanciamiento social, entonces es posible que nos vaya mejor y no veamos acá lo que pasó en otros países, ni se desborde el sistema de salud», sostuvo la funcionaria nacional.
«Argentina está mucho mejor preparada para tener una mayor demanda en su sistema de salud», aseguró.
«Mientras la ciencia pueda dar respuesta con el plasma, antivirales o una vacuna, debemos trabajar para que la cantidad de gente que se infecta día a día sea la menor posible», abundó.
Vizzoti consideró además que Argentina «minimizó» el impacto de la pandemia porque «el aislamiento fue precoz y nacional», hubo una acción «oportuna y temprana» y fue determinante «la interrupción del transporte».
Respecto de la reactivación de algunas actividades productivas que se realizará esta semana en empresas del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) Vizzotti remarcó que se ha trabajado en protocolos «con requerimientos muy concretos, de transporte, con turnos más espaciados, distanciamiento y condiciones de higiene, ventilación».
Agregó que las recomendaciones del Ministerio de Salud sobre aquellos que retomen tareas es que «se evalúe si tienen situación de riesgo, si conviven con alguien en riesgo o si trabaja en un barrio vulnerable».
«En el AMBA hay que monitorear cómo evoluciona la curva de casos y si fuera necesario dar un paso atrás. Ninguna actividad será igual que el 19 de marzo», cuando comenzó el aislamiento, así como la rutina de las personas, abundó.
Destacó también que «no está permitido el transporte entre ciudades» y se busca que las actividades «no impacten casi nada en el transporte público de pasajeros».
Sobre el incremento de contagios de esos días en el AMBA, Vizzotti dijo que esa área, la más densamente poblada del país «tiene que seguir trabajando en la fase 3, con muchísima atención en lo que se exceptúa y en las actividades», así como perseverar en las rutinas de prevención como «el lavado de manos y el distanciamiento».
La funcionaria también se refirió a la implementación de la aplicación Cuidar, que ha recibido objeciones de la oposición porque podría permitir conocer la localización del usuario: «La persona tiene la opción de aceptar o no la georeferenciación. La idea es generar estrategias complementarias y esta es una herramienta más para detectar» situaciones que deba atender el sistema de salud.
Sobre la situación en las cárceles y el reclamo de los reclusos frente a la pandemia, dijo que «tuvimos reunión con algunos delegados de los privados de la libertad. Ha sido muy positivo y se pudo implementar el control de temperatura y prevención del distanciamiento físico, aspectos como no compartir el mate, utensilios de cocina y también hay un pabellón de personas en condición de riesgo».
En cuanto a la situación de contagio en los barrios populares, sostuvo que en este caso es «complejo» el distanciamiento y se está buscando la «detección precoz» de infectados con el virus de Covid-19.
«Hay que gestionar la realidad para minimizar la transmisión, acercar agua potable y alimentos y articular con la iglesia y organizaciones sociales, que son protagonistas. Se detecta y deriva, identificar a las personas que están en riesgo, ponerlas a resguardo y estar alerta a las personas con fiebre para aislarlas y minimizar la transmisión» del virus, señaló Télam.