Así lo indicaron fuentes oficiales, que detallaron que el Presidente podría realizar el anuncio junto al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dado que en el AMBA no habrá un levantamiento generalizado de la cuarentena.
La nueva fase de la cuarentena, que el Gobierno denominó de «salida progresiva», permitiría reabrir varias industrias y comercios, con restricciones, en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
Según indicaron las mismas fuentes a Noticias Argentinas, «el mayor problema es el transporte público», por lo que «hay que abrir actividades con mucho cuidado y sin colapsar el transporte».
En ese marco, el Presidente se reunió ayer en la Quinta Presidencial de Olivos con Kicillof, quien llevó propuestas para realizar una «progresiva habilitación» de actividades productivas en los diversos cordones del Gran Buenos Aires.
Previamente, el gobernador bonaerense había mantenido una reunión con el Comité de Expertos de la provincia para analizar el desarrollo de la situación epidemiológica y definir la nueva etapa de la cuarentena, que comenzará el próximo lunes y se extenderá hasta el 25 de mayo inclusive, dado que se trata de un feriado nacional.
Por la mañana del jueves, Alberto Fernández recibió al jefe de Gobierno porteño, quien le presentó una serie de propuestas para aplicar en la nueva etapa de la cuarentena en la ciudad de Buenos Aires, que contempla la posibilidad de permitir «salidas recreativas» y la apertura de algunos comercios.
Además, el Presidente y el jefe de Gabinete mantuvieron una serie de charlas individuales con los gobernadores, para terminar de ultimar los detalles de lo que será la nueva fase del aislamiento social obligatorio.
De esta manera, el Gobierno nacional anunciará mañana una «flexibilización armónica» de la cuarentena, con el «objetivo de transitar una salida gradual» pero con «condiciones específicas en cada lugar» del país y con «protocolo por actividad» económica.