Por iniciativa propia, un grupo de empleados de la sucursal Rawson de Supermercados La Anónima, acercó una donación de alimentos al Complejo de Viviendas Tuteladas.
Desde la entidad, que depende de la Secretaría de Desarrollo Social y Familia, agradecen el gesto. El responsable de Casas Tuteladas, José Signorotto, dijo que “por voluntad de ellos, y de su propio peculio, se juntaron para llegar con este aporte destinado a nuestros abuelos”.
Los vecinos entregaron alimentos no perecederos “cajas de leche, puré de tomate, flan, gelatina, entre otros elementos”, dijo Signorotto.
Comentó que “agradecemos esta ayuda que hicieron de corazón” y también destacó el aporte constante “del municipio que posibilitó que no les falte nada a los abuelos. En nuestro país estamos viviendo momentos muy particulares y debo decir que el área de Tercera Edad local está haciendo un gran trabajo de contención para que todos los adultos mayores de la ciudad estén asistidos plenamente”.
