El ritmo en el centro de Comodoro Rivadavia no es el mismo desde el 18 de marzo. Desde que en la Argentina se estableció la cuarentena obligatoria para frenar el avance del coronavirus, nada volvió a ser igual.
Así los locales de venta de ropa, entre otros rubros, permanecieron cerrados hasta que el municipio habilitó hace tres semanas que pudieran volver a atender al público.
En medio de ello, los gastos se iban acumulando y los ingresos estaban en cero. Algunos comerciantes decidieron entonces comenzar a incursionar con tiendas online para que tratar de generar algún tipo de venta y, de paso, no perder su clientela.
Las ventas online no es algo nuevo, pero en Comodoro era toda una incógnita. Los dueños de las tiendas de ropa sabían que no recuperarían el 100% de la capacidad de facturación, pero pasarían de no tener nada a “tener algo”. Así lo entendió Diego Fueyo, comerciante de indumentaria, quien destaca que modalidad de ventas online es difícil de implementar en esta ciudad, pero que sirve para sea una puerta de ingreso para futuras ventas.
“Tiene una problemática que es el stock. Vos corrés el riesgo que si no lo tenés fino, de vender lo mismo en la tienda física y en la tienda virtual, se te puede hacer lío. En la mayoría de los locales que laburan con el servicio online, tienen su stock propio para internet, pero eso demanda una inversión similar a tener otro local”, dimensionó el propietario de la tienda Soho.
“Nosotros los primeros días facturábamos un 20% de lo que facturábamos de los dos locales que tengo. Eso es bueno. No te alcanza para pagar los costos fijos que tiene un local, pero sirve antes de no tener nada”, consideró Fueyo en diálogo con El Patagónico.
Cuando el municipio dio el visto bueno para que los comerciantes pudieran volver a abrir sus puertas, las ventas online bajaron a un 5%. “Mucha de la gente entra por las redes sociales. Entra a las redes para ver qué hay. Toma la decisión de comprar y termina viniendo al local. Por lo que no podés dejar de tener. La primera información la tiene del canal online y ya viene con la compra media definida”, explicó el comerciante.
NUEVOS HABITOS
Empresarios de otros rubros comerciales subrayaron que es muy difícil implementar el servicio de ventas online o el delivery. Coinciden en que es una cuestión de costumbre y que llevará un tiempo que se pueda aplicar como en otras ciudades del país. Fueyo aseveró que la mayoría de sus clientes compró de forma contra entrega antes que poner sus datos en una página de internet. “La página está bien armada, hicimos pruebas y preguntamos a la gente para saber su opinión y la verdad que gustó. No todo el mundo está acostumbrado en Comodoro a comprar online. Es más, el 90% de las ventas que hacés te consultan por WhatsApp. O te piden que lleves el posnet. Solo un 30% compra de forma online. Quizás es un poco el miedo a que no le entregues el producto”, graficó.
Sin embargo, la reapertura de los comercios, según Fueyo, permitió que se recuperara el 70% de la capacidad de ventas de antes de la cuarentena. “Estoy contento porque si me comparo con un proveedor mío en Buenos Aires y que no puede abrir hace 90 días, la situación nuestra es mucho mejor”, contrastó.
“VER EL VASO MEDIO LLENO”
Fueyo prefiere ver el vaso medio lleno frente a la situación que se vive con la pandemia.
“El primer mes, que estuvimos frenados, tuve que poner plata de mi bolsillo para pagar casi todo. Algunas cosas las pude refinanciar con los proveedores, pero sueldos y alquileres lo puse yo. El segundo mes la Municipalidad me dio crédito y me sostuve. El tercer mes no tener que poner plata será un alivio. Vos decís no estoy ganando, pero no estoy poniendo plata y sigo vivo. Mientras estemos abiertos hay que ver el vaso medio lleno. Hay otros que están mucho más complicados que uno”, analizó.
“Yo aguanto por un montón de cosas, porque se encariña con los locales, porque tengo empleados que son de fierro y porque está la expectativa de decir que en algún momento vamos a tener premio. No estamos ganando plata, pero no te hizo cerrar. Te hizo apostar a que algún momento se reactive y volvamos a ganar plata. Eso es recontra positivo”, aseguró el comerciante comodorense.