Aumentan los depósitos en dólares del sector privado .Los depósitos en dólares del sector privado hilvanaron por primera vez en el año tres semanas consecutivas de crecimiento hasta alcanzar los US$ 17.060 millones, casi 300 millones más que a finales del mes pasado, y recuperaron los niveles existentes a mediados de mayo, según informes del Banco Central (BCRA).
Puntualmente, los depósitos aumentaron US$ 285 millones desde el 26 de junio, cuando tocaron los US$ 16.775 millones -mínimo desde el 6 de noviembre de 2016- para, finalmente, alcanzar los US$ 17.060 millones el 21 de julio, último dato disponible.
El dato cobra relevancia si se tiene en cuenta que, a excepción de las últimas semanas de 2019, los depósitos venían cayendo casi sin interrupciones desde agosto de 2019 tras haber alcanzado el récord de US$ 32.492 millones.
Según el último informe del BCRA, las «Personas humanas» compraron en mayo US$ 438 millones para atesoramiento, menos de la mitad que en 2019 pero 15 veces más que en marzo de este año, cuando ya regía el cupo de US$ 200 por persona y el 30% de recargo por el impuesto PAIS.
Además, cerca de 2.400.000 de personas compraron un promedio de US$ 190 en mayo, duplicando a la cantidad que lo habían accedido al mercado de cambios en abril (1,2 millones) y seis veces más que en marzo (400 mil).
«La compra del cupo de 200 dólares aumentó en las últimas semanas ante la búsqueda de resguardo por la incertidumbre de la crisis, lo que hizo que también subieran los depósitos en dólares», apuntó a Télam Julia Segoviano, economista de la consultora LCG.
«De todos modos -agregó- los dólares blue subió bastante. Si empieza a haber mayor inestabilidad y aumento sostenido de la brecha con el oficial volverá el goteo de divisas. No tomaría el aumento en los depósitos como una señal permanente».
Por su parte, el economista jefe de Ecolatina, Matias Rajnerman, sostuvo que el aumento de los depósitos responde a dos factores: «Por un lado, a la compra de dólares minoristas que se quedan dentro del sistema financiero local para ahorro y no para. Y, en segunda instancia, a que pasó un poco el miedo inicial del gobierno de Alberto Fernández y de la cuarentena a una confiscación de los depósitos o alguna que atacara a los ahorristas».
«En este marco, dejaron de salir depósitos y, en el extremo, algunos pocos sacaron su plata del colchón y la llevaron de vuelta al banco», afirmó.
Respecto del aumento de la brecha dólares blue, que esta semana alcanzó el récord de 140 pesos tras las restricciones del BCRA para evitar los llamados «coleros digitales», el economista afirmó que no afectará «de manera significativa» a los depósitos.
«Si bien crece el incentivo al ‘puré’ (operación de compra de dólares en el mercado oficial para su posterior venta en el paralelo), es una operación que implica, por un lado, pasarse a pesos en un contexto de mucha incertidumbre y, a la vez, salir del mercado formal para entrar en el informal. Por eso, creo que su impacto sobre el total del sistema es acotado», afirmó.
En las últimas semanas, el Banco Central detectó que numerosas cajas de ahorro abiertas en bancos virtuales que, sin ingresar su cuit y otras referencias, y compraban hasta US$ 200 a precio oficial para luego venderlo en el mercado negro o transferirlo a terceros.
Ante el aumento sostenido de estas operaciones dispuso, a través de la Comunicación «A» 7072, que los bancos deberán exigir información a los clientes que realicen transferencias a cuentas de destino con ciertas características: aquellas cuya antigüedad sea menor a los 180 días o que no hayan registrado depósitos o extracciones en ese mismo lapso o para cuentas que reciban a partir de dos transferencias en moneda extranjera durante el mes calendario.
En ambos casos, los bancos deberán diferir la acreditación del dinero hasta que el cliente justifique el motivo de la transferencia y, en caso de no producirse la justificación, deberá procederse al rechazo de la transferencia.
Esta semana, el BCRA suspendió unas 300 cuentas que operaban en a través del banco digital Brubank por «coleros virtuales» al comprobar que se trataba de cuentas que recibían pesos para cambiarlos a dólares y luego transferirlos a la cuenta de un tercero.