Alberto Fernández encabezó hoy una reunión con el comité de expertos, compuesto por asesores médicos y científicos, con el fin de avanzar en la definición de las características que tendrá la nueva fase del aislamiento obligatorio por la pandemia de coronavirus, que comenzará el sábado, cuando finalice la actual etapa más estricta, que rige desde el 1 de julio.
Del encuentro, que se realizó en la residencia de Olivos, participaron la embajadora especial de la OMS-OPS para América Latina y el Caribe, Mirta Roses, y los especialistas Pedro Cahn, Ángela Spagnuolo de Gentile, Gustavo Lopardo, Pablo Bonvehi y Javier Farina.
También fueron parte del análisis sobre la situación epidemiológica en el país, el ministro de Salud, Ginés González García; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti; y los secretarios de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y general de la Presidencia, Julio Vitobello.
Este mediodía, al ingresar a la residencia de Olivos, González García reafirmó que «no hay una vacuna mejor que el aislamiento» en las casas y declaró que no le gusta «la palabra flexibilización».
«Se pueden abrir ventanas y otras posibilidades, como alguna apertura a comercios de barrio, pero no está decidido todavía», advirtió el Ministro, quien reiteró que para la toma de decisiones no es sólo «números» lo que se analiza, «sino también variables sociales y económicas».
Esta mañana, uno de los miembros del comité que asesora al Gobierno, el infectólogo Tomás Orduna afirmó que la cifra de 4.250 nuevos infectados registrada ayer fue «una piña en los dientes» de cara a la próxima fase de la cuarentena que se iniciará el sábado próximo.
«Veníamos de siete u ocho días de un amesetamiento de entre 3.000, 3.500 (casos) y todos estábamos viendo que eso podía ser, de alguna manera, el estar en la cumbre, con ese número oscilante; pero esto nos demostró que un día podemos subir 700, 800 casos justo cuando hay que decidir, o está decidido, el repuje final de cómo va a ser el arranque del fin de semana», sostuvo Orduna en declaraciones a la radio AM 750.
Ayer, el jefe de Estado se reunió con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para avanzar en el diálogo sobre la nueva fase de cuarentena en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que involucra a ambos distritos y donde se sitúa el principal foco de contagios y muertes por la pandemia en el país.
El AMBA está compuesto por la Ciudad de Buenos Aires y 35 partidos del Gran Buenos Aires donde el aislamiento en la fase que finaliza mañana rige en forma estricta, aunque un poco más relajado que en el inicio, el 20 de marzo pasado.
Las otras zonas con cuarentena estricta son Resistencia, General Roca y la ciudad de Neuquén, mientras que el resto del país está bajo la modalidad de distanciamiento social preventivo y obligatorio (Dispo), ya que los contagios han ido disminuyendo paulatinamente.
De acuerdo con lo consignado por autoridades bonaerenses y porteñas, en el anuncio de mañana se dispondían la reapertura de algunas actividades con estricto protocolo sanitario.