El mismo lo realizan relevando 50 productos especialmente elegidos en cinco bocas de expendió de nuestro medio. Es así que, realizado y comparando los resultados se observa que durante el mes de junio fue del 1.4 por ciento.
UNA ESTIMACIÓN
Del análisis de los resultados surge que el nivel inflacionario se mantiene en el rango del 1 y 1.9 por ciento, valores que para los últimos años en la argentina resultan relativamente bajos. De mantenerse dicho nivel podemos decir inferir que la inflación anual será de del 21-22 por ciento aproximadamente.
“Hay que remarcar también que desde el comienzo de la pandemia existen causas que hacen que se vaya acumulando inflación, hoy reprimida por distintas razones y que afectará al aumento de precios. Algunas de estas causas son: Parte de la economía por efecto del virus; aumento de la desocupación; caída de salarios; no cobro de salarios en la Provincia en tiempo y forma; congelamiento de tarifas de servicios y combustibles, y fundamentalmente, una emisión monetaria descomunal para hacer frente a la ayuda social por parte del Estado y que irremediablemente repercutirá en los niveles de inflación cuando salgamos de la actual crisis.
A lo anterior hay que agregarle la incertidumbre por el acuerdo o no de la refinanciación de la deuda, que según el resultado (positivo o negativo) seguramente repercutirá también en los futuros índices de inflación.
Remarcamos una vez más que nuestro centro mide solamente rubros de la canasta básica de hogares, esto es alimentos cárneos, artículos de limpieza, frutas y verduras, lácteos y alimentos secos; no mide en consecuencia tarifas de servicios, vestimentas ni gastos de esparcimientos.
Nuestro agradecimiento a los comercios que nos permitieron realizar el trabajo, a los compañeros que hicieron el relevamiento y a los medios de prensa por la difusión” manifestó Claudio D’Ermo, del Centro de Estudios José María Rey.