La presencia del Ministro de Seguridad de Chubut, Federico Massoni en Puerto Madryn permitió que se consultara sobre su opinión con respecto al procedimiento que se llevó a cabo al inicio de la semana sobre el Buque Conarpesa 1 donde se informó que se había “levantado con la red” varios paquetes con unos cuantos kilos de cocaína en su interior y cuya intervención había obedecido por jurisdicción a la Prefectura Naval Argentina.
El polémico ministro manifestó: “Provincia no tuvo intervención de ningún tipo por ser jurisdicción de Prefectura Naval Argentina pero es raro, extremadamente raro se deberá profundizar la investigación porque es poco explicable la situación”.
Las grandes preguntas son, ¿qué es lo que le parece raro al ministro de seguridad de Chubut? ¿Qué hayan encontrado la droga? ¿saber quién dijo que la droga estaba ahí? o ¿que el negocio se haya caído?.
Si bien el barco no tuvo restricción alguna para volver a la zona de pesca, el Ministro sugirió que se continúe con una investigación más profunda. “Las hipótesis pueden ser variadas y también las que se imagine son raras, tiene visos ridículos”, además se preguntó: ¿Qué hacen 10kg de cocaína a 168 millas de la costa chubutense bajo el mar y a esa profundidad?», lo mismo nos preguntamos todos.
Sin embargo, la División Antidrogas de la Federal, por su lado, descubrió el lugar en donde vendían la droga; en un domicilio particular del barrio San Miguel y allí detuvo al “dealer”.
Esto evidencia que la droga pasa, llega y sale de la provincia con una facilidad casi increíble y también deja al descubierto el discurso puramente declamatorio de quienes supuestamente deberían evitar que el narcotráfico se instale en Chubut. Lo de Massoni –claramente—es “vender humo” para los medios que por intereses puramente pecuniarios lo quieren posesionar como el paladín de la Justicia que irá a fondo contra la delincuencia.