El intendente de la ciudad, Gustavo Sastre supervisó las tareas de recuperación y refacción que se están llevando a cabo en el interior de la Casa de la Cultura, que se encuentra ubicada sobre la calle Roque Sáenz Peña entre 25 de Mayo y Roca. Se trata de un patrimonio arquitectónico con 90 años de historia en Puerto Madryn que fue construido en 1930 como vivienda familiar y en la que desde 1979 funciona el área de Cultura municipal. Es un espacio al que normalmente asisten unas 600 personas por día a distintos talleres y se espera poder retomarlos el año próximo.
Al respecto, el Jefe Comunal explicó que “durante los últimos meses se ha iniciado un proceso continuo e intenso de revalorización y recuperación de distintos aspectos edilicios y funcionales. Jerarquizando espacios que estaban en desuso o en malas condiciones, como es el caso del espacio que correspondía al lavadero de la Casa al cual estamos transformando en un taller de restauraciones y montajes”.
“Se está realizando un ordenamiento general, limpieza de áreas de depósito, la rehabilitación del jardín y el patio. Refacciones de la sala de ensamble musical: techos, aberturas, electricidad, canaletas y albañilería general. Reemplazo completo de las luminarias mediante la colocación de lámparas led de diseño y se hicieron múltiples reparaciones en la red eléctrica interna. Renovación de los sistemas de calefacción en todos los ambientes que son de uso diario. Y la recuperación completa del entrepiso para hacerlo habitable nuevamente”, detalló.
Por último, Sastre valoró: “Estas acciones son posibles gracias a que se ha logrado un equipo de trabajo integrado tanto por el personal propio del área de Cultura como así también de otras áreas municipales, principalmente de la Subsecretaría de Servicios Públicos, que están llevando adelante una transformación completa del lugar”.
Vale destacar que la Casa de la Cultura fue construida como vivienda familiar en la década del ‘30, que posteriormente fue usada como casa de alquiler e incluso llegaron a vivir varias familias simultáneamente. En los tempranos ‘70 tuvo una etapa donde funcionó una clínica médica.
Y finalmente en el año 1979 fue adquirida por el Municipio para destinarla a Casa de la Cultura. Desde el punto de vista patrimonial mantiene una gran integridad en su estructura original. Está bajo protección Municipal en el Registro de Bienes Culturales y actualmente funciona la Subsecretaría de Cultura con numerosas actividades.