Hay mucha expectativa en el Juzgado Federal de Rawson con que van a decir este viernes 7 de agosto la exmujer y uno de los hijos del millonario sindicalista Héctor Rubén González. ¿Contarán algo que no está en la causa? ¿Involucrarán a alguien más? ¿Dirán quién es el verdadero dueño del bosque de marihuana? Son solo algunas de las especulaciones que generan la ampliación de indagatoria que les concedió el juez luego que ambos pidieran declarar.
Como ya se sabe, a la expareja de González y a sus dos hijos la Justicia Federal los cree narcotraficantes y podrían ir a la cárcel por un concurso de graves delitos que les endilgan por aquel “bosque de marihuana” que la policía les encontró el 19 de mayo pasado en el patio de la imponente propiedad en la que viven.
Allí, además del centenar de plantas de cannabis, los quinientos plantines y una decena de cactus San Pedro; las autoridades descubrieron toda una estructura creada para la siembra, el cultivo y la cosecha de marihuana, y desde un primer momento los investigadores sospechan que quienes viven en la mansión no han sido los artífices o creadores de esa estructura sino “alguien más”.
Es por eso que se piensa que este viernes 7 de agosto los imputados van a dar algún nombre o que quizás van a aportar datos que no están en la causa.
Dicen que las alarmas se encendieron inmediatamente en el Grupo Jornada, en el propio González y en algunos “frecuentadores” de la mansión en donde descubrieron la droga, cuando se enteraron que la exmujer y uno de los hijos de “El Gordo” habían pedido declarar. Claro, ven que “las balas les están picando cerca”.
Vale recordar que después que el magistrado los escuche tendría diez días hábiles para resolverles la situación procesal y determinar si los procesa con prisión preventiva o no.
Los delitos que les atribuyen son gravísimos y de no haber sido por la pandemia hubieran estado tal vez presos en la Unidad 6 de Rawson, esperando allí el día del juicio.