Guillermo Costes, integrante del Consejo de Administración de la Cooperativa, se refirió en diálogo con Crónica al aumento tarifario solicitado por la institución y realizó un análisis pormenorizado del tema. Con fuertes críticas, Costes disparó contra la administración del exintendente Néstor Di Pierro y lo acusó de haber perjudicado a la SCPL. Además, remarcó que con el actual contexto económico que rige en el país, el incremento solicitado por la Cooperativa es algo ínfimo, si se tienen en cuenta otros costos que la gente debe afrontar día a día, como por ejemplo los precios en un supermercado.
“La ciudad es prisionera de una ordenanza perversa, que es la 6050. Esta ordenanza determina la compleja forma de fijación de tarifas. Se sancionó en la administración de Marcelo Guinle, se creó en un momento en donde en el país había estabilidad. Esa estabilidad peso-dólar hacía que cualquier mecanismo no fuera perjudicial, porque justamente había estabilidad de precios. Luego de la crisis de 2001, este mecanismo explotó. Eso conllevó una variación de precios de todo tipo. Terminamos llegando a una especie de ajuste automático, esto fue denominado ‘pass through’. Años después, este pase directo fue sepultado por Néstor Di Pierro, en el año 2012, en donde se volvió a la ordenanza 6050”, dijo Guillermo Costes para analizar el aumento de tarifas solicitado por la SCPL.
En esta línea, el secretario del Consejo de Administración de la Cooperativa planteó que a partir de que se volvió a la vieja ordenanza 6050, la institución comenzó a tener serios problemas económicos. Para justificar esto, habló sobre el proceso inflacionario que en ese entonces azotaba a Argentina, y señaló además que, en ese entonces, tanto el Concejo Deliberante como el Poder Ejecutivo no querían discutir esta realidad. “El endeudamiento de la Cooperativa empieza en el año 2010, aproximadamente y continúa hasta nuestros días. A nosotros nos aumentan todo y tenemos que pagar todas estas cosas con aumento. Nos dan menos de lo que necesitamos, es decir que seguimos acumulando deuda”, se quejó el entrevistado.
“En el supermercado las cosas aumentaron mucho más, en todos los ámbitos pasó lo mismo. Lo que pasa es que no hay audiencia pública para discutir el precio de la leche, o de la harina o del azúcar, tampoco del pan o de cualquier otro alimento. Simplemente pasa que los precios van teniendo un acomodamiento automático. Esto, en el caso de la Cooperativa no pasa, a nosotros también nos aumentan todo, pero ese aumento recién lo discutimos al año. Entonces, claro, el número suena muy feo. Yo quiero hablar de una realidad en Comodoro. El 35 por ciento de las boletas que distribuye la Cooperativa son inferiores a los 3.000 pesos. Otro 45 por ciento es inferior a los 6.000 pesos. Cuéntenme cuántos carritos de supermercado podemos llenar con 6.000 pesos. Esos son los números de los que hablamos. Y cuando se dice que hay gente que tiene facturas de 15.000 o 20.000 pesos, hay que decir que sí, que esa gente existe, pero son cien”, agregó Costes.
Fuente: Crónica