El grupo de vecinos que presentó ante el Concejo Deliberante un pedido para que se declare la emergencia económica y social en la ciudad fue recibido por concejales de los distintos bloques a fin de analizar la propuesta.
La convocatoria surgió luego de que se movilizaran hasta el cuerpo deliberativo para cuestionar la falta de avances en la iniciativa que fue entregada con el acompañamiento de más de 500 firmas de distintos barrios, bajo la premisa de instalar el tema y lograr el acompañamiento del municipio para que las familias vulnerables puedan sobrellevar las dificultades para abonar las facturas de los servicios básicos.
Tomás Pinto, a modo de vocero, recordó, «nosotros hemos conformado un grupo de autoconvocados denominado vecinos en emergencia que surgió a partir de las 500 firmas, y habíamos logrado una mesa de trabajo para tratar el proyecto de ordenanza que confeccionamos. Habíamos logrado ciertos niveles de consenso, y creíamos que íbamos a llegar a buen término, pero de pronto, a mediados de enero se fue dilatando hasta que en un determinado momento dejaron de convocarnos».
Ahora «tomamos la decisión de venir al Concejo Deliberante a exigir que esa mesa se reanude. Hay un agravante, que tienen que tener en cuenta los vecinos, y es que durante el 2020 no se cortaron los servicios porque existía un decreto de necesidad y urgencia de la Nación que impedía los cortes. Pero ese decreto perdió validez a partir del 1º de marzo, y hoy estamos a la buena de Dios».
Señaló Pinto que «los vecinos que tienen deuda, que son una alta mayoría de los trabajadores de Esquel, que no tienen como pagar, ahora están con la angustia terrible de saber que se pueden iniciar los cortes en cualquier momento. Vinimos a profundizar el trabajo sobre nuestra propuesta que contempla el futuro de la deuda de la luz y el gas».
Por otra parte, hizo hincapié en que «nadie puede vivir con una deuda que supera cinco o seis veces tus ingresos, con el agravante de que existe la posibilidad concreta del corte. Entonces hay que sacarle al vecino el peso de la deuda y la amenaza de corte.
A futuro, tenemos la propuesta de desdoblar la propuesta y que solamente se cobre lo que se consume, mientras el resto de los ítems sean voluntarios. Así que los vecinos están en una situación desesperante con el agravante de que vienen los cortes».
DEUDAS ACUMULADAS
Enrique Ulloga, trabajador particular, changarín, al tomar la palabra desde las puertas del Concejo Deliberante de Esquel comentó que con sus magros ingresos no puede pagar los servicios y las deudas se acumulan. «No me da desde que se pararon todos los trabajos por la pandemia. Llevo acumulados 56 mil pesos de luz y 37 mil pesos de gas. Vivo en el barrio Bella Vista donde tengo mi familia completa, tres hijos que no trabajan y a mi papá de 76 años».
Patricia, otra vecina movilizada, declaró, «tengo deuda de luz y de gas, soy desocupada y mi marido trabaja, pero no nos alcanza para comer y pagar la luz».