Las sesiones en Cámara Gesell con los niños presuntamente abusados por el profesor de música en la Escuela de Nivel Inicial Nº 406 de Comodoro Rivadavia comenzaron hace unos días aunque sin resultados concretos hasta el momento.
La noticia fue dada a conocer la decana del cuerpo interdisciplinario forense de la justicia del Chubut, Eliana Bévolo, quien reconoció que se trata de un mecanismo complejo porque los niños que participan en las sesiones son criaturas que concurrían a salas de 3, 4 y 5 años y que, por su corta edad, no tienen mucho manejo del lenguaje ni tampoco pueden ser interrogados abiertamente.
«La psicóloga que interviene apela a recursos tales como juegos, intentando en principio ganarse la confianza de los pequeños, que estos se sientan cómodos y confiados para recién poder avanzar», detalló Bévolo ante los medios locales.
La Cámara Gesell es una sala especialmente acondicionada para el ámbito infantil, con dibujos en las paredes y juguetes en lo que definió como «lo más parecido a una salita del jardín», y muy distinto a las salas de audiencias en la que deponen los adultos.
Desde afuera, las partes pueden seguir las sesiones a través de cámaras y realizar consultas por un sistema de conexión con la psicóloga.
Bévolo reconoció que es un mecanismo bastante utilizado para entrevistar a menores, pero en general se trata con adolescentes o con niños «no tan pequeños», lo que hace en este caso más difícil la tarea.
La decana reconoció que «las audiencias podrán llevar mucho más tiempo del que se cree», lo cual fue comprendido por los padres, y fue lo que descomprimió la situación, los cortes de calle y las manifestaciones callejeras cedieron en intensidad.
El fiscal jefe de Comodoro Rivadavia, Marcelo Crettón, confirmó que «suman 42 las denuncias formuladas por los padres» por presuntos casos de abuso sexual contra un profesor de música registradas en el Jardín 406, donde el docente ejercía en salas de 3, 4 y 5 años.
Otras fuentes aseguran que las denuncias de los padres treparon a 60, aunque el dato no fue confirmado oficialmente.
La causa se desarrolla de manera reservada atento a las edades de los involucrados y en principio la acusación apunta a «abuso sexual simple» consistente en tocamientos.