Vaca Muerta lidera las inversiones del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), con el 70% de los fondos comprometidos. Con un total de 5.400 millones de dólares en proyectos relacionados con el shale, esta región se consolida como el eje central del desarrollo energético en Argentina. Este régimen, aprobado el 23 de agosto, busca atraer capital a sectores estratégicos y dar previsibilidad a las empresas para impulsar grandes proyectos.
El informe presentado por Guillermo Francos, jefe de Gabinete, detalla que seis iniciativas fueron inscritas al RIGI: dos proyectos vinculados a Vaca Muerta, uno relacionado con la energía solar, dos enfocados en el litio y uno en el sector aurífero. Sin embargo, Vaca Muerta se posiciona como el mayor receptor de fondos, reforzando su papel como motor clave de la economía nacional.
En total, los proyectos en evaluación suman 7.820 millones de dólares, destacando la relevancia de este programa en la atracción de inversiones estratégicas para el país.
Vaca Muerta como motor de inversiones estratégicas
El liderazgo de Vaca Muerta en las inversiones del RIGI se basa en la magnitud y el impacto de sus proyectos. Entre ellos, destaca el oleoducto Vaca Muerta Sur (VMOS), con una inversión de hasta 3.000 millones de dólares liderada por YPF, Pan American Energy, Vista, Pampa Energía, Pluspetrol, Chevron y Shell. Este proyecto permitirá duplicar las exportaciones de petróleo en los próximos dos años.
Otra iniciativa clave es el proyecto de licuefacción de gas natural, liderado por Pan American Energy y Golar LNG. Este propone instalar una barcaza en el Golfo de San Matías, Río Negro, para producir gas natural licuado (GNL). La inversión inicial es de 2.900 millones de dólares, con un horizonte de 7.000 millones en 20 años.
Estos proyectos subrayan cómo Vaca Muerta no solo lidera las inversiones del RIGI, sino que también impulsa el desarrollo energético estratégico de Argentina.
Inversiones en minería y energías renovables
El RIGI también incluye proyectos fuera de Vaca Muerta, diversificando las áreas de inversión. En energías renovables, destaca el proyecto solar “El Quemado” de YPF Luz, que planea instalar un parque solar en Mendoza con una capacidad de 305 MW y una inversión de 220 millones de dólares.
En el sector del litio, Galan Lithium lidera el proyecto Hombre Muerto Oeste en Catamarca, con una inversión de 200 millones de dólares para producir 12.000 toneladas anuales de carbonato de litio equivalente. Posco, por su parte, avanza con “Sal de Oro”, un proyecto de 1.000 millones de dólares en Salta que incluye la producción de fosfato y carbonato de litio en etapas.
En cuanto al oro, Minas Argentinas S.A. desarrolla el proyecto “Gualcamayo” en San Juan, con una inversión de 1.000 millones de dólares para producir 120 mil onzas anuales durante al menos 17 años.
El impacto económico del RIGI y Vaca Muerta
El Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones busca atraer proyectos que no se habrían concretado sin este marco. Según el informe oficial, los beneficios dependerán del tipo y cantidad de proyectos aprobados, pero hasta ahora las inversiones comprometidas no representan costos fiscales directos.
Con Vaca Muerta liderando las inversiones del RIGI, este régimen promete transformar sectores estratégicos como la energía, la minería y las renovables, fortaleciendo la competitividad de Argentina en el mercado global.
Conclusión: el papel de Vaca Muerta en el futuro económico
El protagonismo de Vaca Muerta en el RIGI confirma su posición como el principal motor energético de Argentina. Su liderazgo en las inversiones comprometidas subraya su relevancia en el desarrollo económico, mientras que los proyectos en minería y energías renovables complementan el impacto positivo del régimen. Con un enfoque en atraer capital estratégico, el RIGI marca un camino hacia un crecimiento sostenible y competitivo para el país.