Un ave con habilidades matemáticas. Un estudio científico reciente reveló que una especie de ave es capaz de identificar formas geométricas como estrellas, cuadrados y paralelogramos, lo que sugiere un nivel de percepción espacial y cognitiva insospechado en el mundo animal.
na nueva investigación desarrollada por científicos alemanes reveló que los cuervos carroñeros (Corvus corone) poseen una sorprendente habilidad para identificar figuras geométricas, como estrellas, cuadrados o medias lunas, según publicó Canal 26.
Este hallazgo representa un enorme avance en el estudio de la inteligencia animal, ya que sugiere que estas aves pueden reconocer propiedades geométricas complejas, como la longitud de los lados, la presencia de líneas paralelas y los ángulos rectos, capacidades que hasta ahora se atribuían exclusivamente al ser humano.
Una investigación reveló que los cuervos tienen nociones de geometría
El estudio fue realizado por un equipo de neurocientíficos alemanes, quienes entrenaron a dos cuervos machos para seleccionar, entre seis figuras proyectadas en una pantalla, aquella que era distinta a las demás.
A medida que los investigadores aumentaban la complejidad de las formas, presentando variaciones sutiles entre paralelogramos, trapecios y cuadrados, los cuervos continuaban respondiendo correctamente, incluso cuando dejaban de recibir recompensas alimenticias.
Este comportamiento sugiere una capacidad denominada “regularidad geométrica”, es decir, la habilidad para detectar patrones espaciales complejos basados en características como longitud, simetría, ángulos y paralelismo.
Según Andreas Nieder, neuropsicólogo de la Universidad de Tübingen y autor principal del estudio, esta destreza podría ser clave para su supervivencia en la naturaleza, permitiéndoles orientarse en el espacio, buscar alimento o reconocer a otros miembros de su especie a partir de detalles visuales.
Giorgio Vallortigara, experto en neurociencia de la Universidad de Trento, quien no participó del estudio, considera que los resultados refuerzan la idea de que los cuervos poseen una forma de inteligencia perceptual comparable a la humana, pese a no contar con un córtex cerebral.
Esta diferencia estructural en el cerebro sugiere que existen rutas evolutivas alternativas que conducen a la aparición de comportamientos complejos y flexibles.
El hallazgo se suma a una larga lista de capacidades sorprendentes en los cuervos: pueden contar hasta cuatro, reconocer voces humanas, recordar rostros, fabricar herramientas e incluso planificar acciones futuras. Algunas especies también parecen tener conciencia del tamaño de su cuerpo.
El descubrimiento marca un nuevo hito en el estudio de la cognición animal y abre interrogantes sobre qué otras especies podrían compartir esta habilidad. Según los investigadores, este es solo el inicio de una exploración más profunda sobre cómo el cerebro de las aves procesa el mundo visual.
“Los humanos no tienen el monopolio de habilidades como el pensamiento abstracto o la planificación anticipada”, concluyó Heather Williams, bióloga del Williams College, en declaraciones a CNN.