Lago del Desierto, un paraíso argentino que deslumbra por su color turquesa y paisajes verdes.
El Lago del Desierto, ubicado a 37 kilómetros de El Chaltén en Santa Cruz, Argentina, se ha convertido en un destino imperdible por sus aguas turquesa y montañas que recuerdan a Nueva Zelanda, ofreciendo actividades al aire libre en un entorno natural único.
Un tesoro patagónico con historia
Lago del Desierto se encuentra próximo a la frontera con Chile y fue escenario de disputas territoriales hasta 1994, cuando un Tribunal Arbitral latinoamericano falló a favor de Argentina, asegurando la soberanía sobre la zona. “Durante las múltiples batallas territoriales con el país vecino, estuvo en litigio hasta mediados de los años 90”, destaca la historia del lugar, según informó El Destape.
Qué hacer en Lago del Desierto
El lago ofrece pesca, navegación y senderismo, con vistas panorámicas de los glaciares Huemul y Vespignani. Rodeado de bosques andinos y montañas con picos nevados, es ideal para acampar o alojarse en el único hotel disponible, Aguas Arriba Lodge. No hay transporte público, por lo que se recomienda acceder con vehículo propio o excursiones desde El Chaltén. “Lo que hay que tener en cuenta es que no hay transporte público y para visitar esta zona es necesario hacerlo con una excursión desde El Chaltén o con vehículo propio”, señalan los expertos.
El clima patagónico puede ser cambiante, por lo que se aconseja visitar entre octubre y abril, cuando las temperaturas son más agradables y se pueden disfrutar plenamente las actividades al aire libre.
Impacto y relevancia del Lago del Desierto
Este destino no solo ofrece paisajes de ensueño, sino que también representa un patrimonio histórico y natural de Argentina que combina aventura, cultura y naturaleza en un solo lugar. Lago del Desierto se consolida así como un atractivo turístico esencial para quienes buscan explorar la Patagonia de manera única.