El director técnico de Boca Juniors, Miguel Ángel Russo, fue dado de alta este viernes luego de permanecer dos días internado en el Instituto Fleni, donde se sometió a estudios médicos de control.
Su evolución es favorable, aunque no estaría en el banco de suplentes en el próximo encuentro del Xeneize.
Russo había ingresado a la clínica el miércoles para realizarse estudios relacionados con su enfermedad de base. Los médicos decidieron mantenerlo bajo observación durante 48 horas antes de otorgarle el alta.
De acuerdo con C5N, no es la primera vez que el técnico atraviesa complicaciones de salud en esta etapa: a comienzos de septiembre también había estado internado durante una semana por una infección urinaria.
La palabra del entrenador
Tras recibir el alta en aquella oportunidad, Russo volvió a los entrenamientos, aunque debió afrontar rumores sobre su estado físico. En conferencia de prensa, fue contundente: “Hubo muchos que dijeron tonterías. El que sabe sobre su salud es uno mismo”.
Ahora, nuevamente apartado de la rutina por cuestiones médicas, todo indica que no viajará con el plantel a Florencio Varela para el duelo frente a Defensa y Justicia, válido por la décima fecha del Torneo Clausura.
Lo que viene para Boca
El club aún no confirmó quién ocupará su lugar en el banco el sábado, aunque el cuerpo técnico trabaja para que la transición sea ordenada y el equipo mantenga la concentración en un partido clave.
La prioridad estará puesta en la salud de Russo, que continuará con controles médicos en los próximos días, mientras el plantel buscará sumar de a tres como visitante.
La evolución positiva de Miguel Ángel Russo trae alivio al mundo Boca, que sigue de cerca la recuperación de su entrenador. El objetivo ahora será que pueda reincorporarse al trabajo sin sobresaltos y en las mejores condiciones.