La dimisión del primer ministro Sébastien Lecornu ha sumido a Francia en una profunda crisis institucional que ya genera reverberaciones en los mercados financieros y enciende las alarmas en Bruselas, según el análisis de los principales economistas europeos.
De acuerdo con la información reportada por el medio Financial Times, el mercado de deuda francesa reaccionó inmediatamente a la dimisión de Lecornu. Los rendimientos de los bonos franceses a 10 años se negociaban a 86 puntos básicos por encima de sus equivalentes alemanes, un nivel no visto desde finales de 2024 durante el colapso del Gobierno de Barnier.
Goldman Sachs señaló que Francia ha experimentado el mayor aumento del riesgo país entre los principales mercados desde las elecciones del año pasado.
Consecuencias Económicas y Fiscales
La parálisis institucional amenaza con socavar el crecimiento económico y complicar los esfuerzos de estabilización de las finanzas públicas. Según estimaciones de Goldman Sachs, el déficit de 2026 podría aumentar en 0,1 puntos porcentuales, mientras que el crecimiento del PIB podría ralentizarse en torno a 0,2 puntos porcentuales. La economista de ING, Charlotte de Montpellier, advirtió que Francia corre el riesgo de entrar en el nuevo año sin un presupuesto aprobado para 2026.
Escenarios Futuros y Posible Intervención del BCE
Los analistas contemplan dos caminos principales para resolver la crisis, ambos con riesgos significativos. Emmanuel Macron podría nombrar un nuevo primer ministro o disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones anticipadas. Mientras tanto, el mercado especula sobre una posible intervención del Banco Central Europeo mediante su Instrumento de Protección de la Transmisión (TPI) para contener las tensiones en el mercado de bonos franceses, aunque los criterios de activación son estrictos.
La crisis política llega en un momento particularmente delicado, ya que Francia está sometida a un procedimiento de déficit excesivo por parte de la Comisión Europea. La falta de avances en la consolidación fiscal podría dejar el déficit rondando el 5% del PIB en 2026, con una deuda pública que superaría el 116% del PIB, según las proyecciones de los analistas. Información extraída del medio Euro News.