El Rey Felipe VI concluyó su visita de Estado a China junto a la Reina Letizia reafirmando la importancia de fortalecer los lazos bilaterales y mantener un “diálogo fructífero” con Pekín.
Sin embargo, el monarca subrayó que esta cooperación no implica renunciar a los valores fundamentales de España, como la democracia, el Derecho Internacional y el respeto a los Derechos Humanos.
El viaje de tres días incluyó encuentros con las principales autoridades del gigante asiático, entre ellas el presidente Xi Jinping, el primer ministro Li Qiang y el presidente del Congreso Nacional Popular, Zhao Leji.
Un mensaje equilibrado entre cooperación y principios
Durante su discurso de cierre ante la colectividad española en Pekín, Felipe VI destacó que “China es hoy un actor clave en la escena internacional, con enormes desafíos y transformaciones en curso”. En esa línea, el Rey insistió en la necesidad de mantener un intercambio constante y respetuoso, tanto a nivel bilateral como europeo.
El monarca recordó que “España mantiene con ella un diálogo fructífero, europeo y propio a la vez”, y agregó: “Seguiremos defendiendo nuestros valores —los de la democracia, el Derecho Internacional, los Derechos Humanos y la cooperación multilateral— desde la confianza firme en quiénes somos como nación, una España moderna, solidaria, creativa, abierta y comprometida con los grandes desafíos de nuestro tiempo”.
Xi Jinping llama al rey Felipe “buen amigo del pueblo chino”
En el marco del viaje, Xi Jinping calificó a Felipe VI como un “buen amigo del pueblo chino”, gesto que subraya el buen momento diplomático entre ambos países. Los monarcas españoles participaron junto al presidente chino en una ofrenda floral en la emblemática Plaza de Tiananmen, acto cargado de simbolismo y respeto mutuo.
El Gobierno español señaló que en los contactos con el Ejecutivo chino “siempre se abordan todos los asuntos de interés, incluido el de los Derechos Humanos”, recordando además que la Unión Europea mantiene un diálogo específico con China sobre esta materia.
Balance positivo del primer viaje de Estado
Antes de regresar a España, Felipe VI expresó su satisfacción con los resultados de la visita, que comenzó en Chengdú y se extendió durante tres días. “Nos marchamos satisfechos con el desarrollo de este primer viaje de Estado, que ha sido especialmente intenso”, aseguró el monarca.
El Rey resumió el propósito del viaje en una frase que refleja el espíritu de cooperación entre ambos países: “Nuestra visita representa la renovación de una voluntad compartida: la de seguir construyendo una relación pragmática basada en el diálogo, el respeto y beneficio mutuos, la amistad y una cooperación amplia y ambiciosa”. Información extraída del medio 20minutos.




