En medio de un clima internacional cargado de advertencias y acusaciones cruzadas, el papa León XIV se refirió públicamente al conflicto diplomático entre el presidente estadounidense Donald Trump y su par venezolano Nicolás Maduro
Durante su vuelo de regreso a Roma, tras su visita a Turquía y Líbano, el Sumo Pontífice instó al diálogo y subrayó que la prioridad debe ser “el bien del pueblo”. Según C5N, el líder de la Iglesia expresó preocupación ante la posibilidad de una escalada que afecte directamente a la población venezolana.
El llamado del Papa: diálogo y prudencia
El pontífice fue consultado por la prensa sobre el ultimátum que Trump lanzó a Maduro para abandonar Venezuela antes del viernes, en un contexto de crecientes tensiones y operaciones estadounidenses sobre barcos supuestamente vinculados al narcotráfico.
“Estamos buscando maneras para calmar la situación y buscar, sobre todo, el bien del pueblo”, expresó durante el viaje.
León XIV sostuvo que las señales provenientes de Estados Unidos “cambian con frecuencia”, lo que genera incertidumbre sobre los pasos futuros de la Casa Blanca. “Parece que ha habido una conversación, pero también está el peligro de que ocurra una operación, incluso invadiendo el territorio. Yo no sé más”, advirtió el Papa ante periodistas internacionales.
También explicó que la Iglesia mantiene gestiones diplomáticas, tanto desde la Conferencia Episcopal como desde la Nunciatura en Venezuela, con el objetivo de reducir la tensión: “Son los ciudadanos quienes sufren la situación y no las autoridades”.
El ultimátum de Trump y la respuesta de Maduro
El conflicto escaló cuando Trump exigió a Nicolás Maduro que abandone Venezuela antes del viernes, según reveló una conversación telefónica del 21 de noviembre. La advertencia se produjo tras meses de esfuerzos por parte de EE.UU. para aumentar la presión sobre el gobierno venezolano, incluyendo ataques a embarcaciones sospechadas de operar en el tráfico de drogas en el Caribe y la designación del llamado Cártel de los Soles como organización terrorista extranjera.
El Gobierno venezolano negó todas las acusaciones, denunció la intención de provocar un cambio de régimen y acusó a Estados Unidos de buscar el control de los recursos naturales del país, especialmente el petróleo.
Durante la conversación, Maduro habría indicado que estaría dispuesto a dejar el país solo bajo ciertas condiciones: una amnistía legal total para él y su familia, el levantamiento de sanciones a más de 100 funcionarios y el cierre de un caso que enfrenta ante la Corte Penal Internacional.
Un escenario delicado
La tensión entre ambos países genera preocupación a nivel regional e internacional. La advertencia de Washington, la resistencia de Caracas y la mediación del Vaticano configuran un panorama inestable. En este contexto, el llamado del Papa León XIV busca abrir un espacio para la diplomacia en un conflicto que podría tener consecuencias directas sobre la población venezolana.
Mientras se acerca el plazo impuesto por Estados Unidos, la comunidad internacional observa con atención. El mensaje del Papa apunta a evitar un enfrentamiento mayor y recordarle a los gobiernos que, en última instancia, quienes sufren las decisiones políticas son los ciudadanos.




