Empresas argentinas proyectan aumentos salariales acordes a la inflación 2026.
La proyección salarial para 2026 comienza a tomar forma en el sector privado argentino, con incrementos que acompañan la inflación estimada y muestran una planificación más estable que en años anteriores. La información surge del relevamiento TISA de Mercer, difundido según informó Noticias Argentina.
Incrementos previstos: un panorama más estable
El estudio Tendencias de Incrementos Salariales en Argentina (TISA), que consultó a 518 empresas de diversos rubros, revela que las compañías planean otorgar un aumento anual del 20% en 2026. Este porcentaje se alinea con las expectativas inflacionarias para ese año: 19,6% según el REM y 23,9% de acuerdo con LatinFocus.
El relevamiento —que incluyó firmas de Consumo Masivo, High Tech, Energía, Ciencias de la Vida y Servicios— muestra que el 47% de las compañías ya tiene definido su presupuesto salarial, mientras que un 26% aún no inició la planificación.
Cómo se proyectan los aumentos y el esquema anual
El informe marca que en 2025 las empresas aplicarán incrementos cercanos al 30%, definidos en base a múltiples variables como desempeño, referencias de mercado e inflación proyectada.
Para 2026, el 36% de las firmas prevé otorgar dos aumentos en el año, mientras que un 29% planea cuatro o más, mostrando una organización más previsible frente a los años de alta inflación.
Los sectores que muestran mayores ajustes previstos para 2025 son Medios y Entretenimiento, Biotecnología, Bancos, Farmacéutica y High Tech, todos con incrementos cercanos al 32%. En contraste, las fintech proyectan subas del 26%.
La mirada de los especialistas
Inés García Toscano, gerente de Career & Rewards de Mercer para Argentina, Uruguay y Paraguay, señaló que las empresas mantienen una estrategia “prudente”, buscando equilibrar incrementos salariales y retención de talento en un contexto de expectativa de estabilización inflacionaria.
Con un 2026 que se perfila más predecible, las empresas argentinas avanzan hacia un esquema salarial moderado y alineado a las proyecciones económicas, marcando un quiebre respecto a los años de mayor volatilidad.




