La titular de la delegación, Mónica Saso, informó que se actuará de oficio por el violento ataque antisemita hacia turistas israelíes, porque hasta el momento, no se presentó ninguna denuncia. “Tomamos cartas en el asunto y estamos trabajando conjuntamente con autoridades y la justicia de la provincia para esclarecer los hechos”.
Desde la Delegación del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) en la provincia del Chubut, su titular, Monica Saso, comentó que en la jornada de ayer tomaron conocimiento de un hecho «realmente lamentable» en la localidad de Lago Puelo, que tuvo lugar entre la una y cuatro de la madrugada del lunes contra turistas israelís y los propietarios del hostel donde se estaban alojando.
“Como INADI hemos tomado la decisión de actuar de oficio” adelantó la funcionaria dado que “no hemos recibido ningún tipo de denuncia”. En este contexto, comunicó que “tomamos cartas en el asunto y estamos trabajando conjuntamente con autoridades y la justicia de la provincia para esclarecer los hechos”.
Finalmente, aseguró que “es un llamado de atención y es algo de potencial gravedad que nosotros tenemos que tomar conciencia y generar herramientas que aporten a la construcción de una sociedad más igualitaria, cimentada en la diversidad”, consideró.
ATAQUE ANTISEMITA
En la madrugada del lunes un reconocido hostel de Lago Puelo identificado por recibir al turismo proveniente de Israel, sufrió un ataque antisemita por parte de tres vecinos de la zona.
Como saldo de la violenta embestida, resultaron heridos varios turistas, los dueños del hostel y efectivos de la policía que intervinieron. Los delincuentes, que también terminaron con lesiones, en ningún momento fueron detenidos por las autoridades y hoy descansan en sus casas. Mientras tanto, el sitio de alojamiento debió cerrar sus puertas en plena temporada ante la falta de garantías para sus huéspedes.Según le contaron a Jornada los dueños de Onda Azul, estas tres personas que violentaron el complejo son conocidos por ellos y también por la fuerza policial
Los incidentes de la madrugada del lunes se extendieron durante tres horas, en las cuales además de romper y herir a varias personas, robaron pertenencias de los turistas y bienes de adentro del hotel. Los hechos comenzaron cerca de la 1:15 de la mañana y tuvieron fin pasadas las 4.Yoav Polack, es el administrador del hostel y contó a Jornada cómo se vivieron esas tres horas de terror: “Empezó 1:15 y duró como 3 horas el episodio.
Tiraron piedras para todos lados, destrozaron como 25 cristales, rompieron tres vehículos, uno de los cuales estaba en el complejo y dos más que estaban estacionados. Robaron muchas cosas, mochilas de turistas, cosas de dentro de la heladera. Y todo ese tiempo con comentarios racistas y xenófobos. Hay tres o cuatro turistas heridos de piedrazos. Mi papá, mi hermano y yo también resultamos heridos”, relató Polack, destacando que se trata de un negocio familiar.Luego siguió con la cronología de los incidentes. Consultado por la intervención de los policías, comentó: “La Policía escucha un estallido de escopeta de parte de estos vecinos que pegaron un tiro contra la pared de una cabaña. A la 1:15 viene una unidad de la Policía y allí empiezan los piedrazos a la unidad policial. Los policías se sintieron en riesgo y decidieron pegar la vuelta y esperar refuerzos. Eso tardó 45 minutos. En esos 45 minutos hubo gran cantidad de daño hacia nuestro establecimiento. Luego regresó la policía con 4 oficiales más y una escopeta y ahí duró como una hora y media más todo esto”.
El administrador del edificio comentó que tres semanas atrás también habían tenido un inconveniente con estas personas, pero que fue algo que no pasó a mayores.“Están identificados, son vecinos de acá del pueblo, los conocemos, también las autoridades. Ya tuvimos un incidente. Pero esta vez se pasó de la raya, y nos obligó a cerrar mi negocio en el pico de la temporada. Debí pedirle a todos los turistas, tanto israelíes como argentinos y los europeos, que se vayan porque no puedo asegurar su bienestar. Las autoridades tampoco me lo están pudiendo asegurar”.
En esa dirección agregó que “nos encantaría abrir cuanto antes, pero no lo vamos a hacer hasta que tengamos la certeza de que las autoridades nos están respaldando”.Recalcó el dueño del establecimiento de la Comarca que “los delincuentes terminaron yendo todos juntos al Hospital con la Policía. Y después de ser atendidos tanto los agentes como estos vecinos, cada uno de ellos se fue a su casa”.
Fuente: El Patagónico