CORFO, a través del equipo del Mercado Concentrador, y el INTA, asesoran a productores del VIRCh en la “importancia de una buena labranza que garantice mejores resultados en la producción”.
El Gobierno Provincial, a través de CORFO, y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), se encuentra desarrollando un plan de trabajo conjunto con el objetivo de optimizar los recursos y acciones que realizan ambos organismos en el territorio provincial. El punto de partida fue el asesoramiento del equipo técnico del Mercado Concentrador y el INTA al productor de tomate bajo cubierta, Cristian Ghigliotto, de la localidad de Dolavon.
La ingeniera agrónoma Itatí Jones explicó el trabajo conjunto entre el Mercado Concentrador y el INTA: “Somos dos instituciones agropecuarias y ambas contamos con un sector hortícola, con mayor o menor influencia en el Valle. Trabajar juntos es unir los esfuerzos para llegar a más cantidad de productores, utilizando mejor los recursos, vehículos y maquinarias”. Además agregó que “ambas instituciones salimos al campo con el mismo proyecto, con las mismas ideas. Desde hace un año que estamos trabajando así y hemos logrado articularnos perfectamente”.
Actualmente, el Mercado Concentrador y el INTA se encuentran trabajando con 12 productores hortícolas asesorados por el Equipo Técnico y a su vez forman parte del Programa “Cambio Rural II”. “Cambio Rural” es un programa que brinda asesoramiento técnico a productores para definir sus planes de trabajo, adquirir tecnología y acceder a herramientas de inversión disponibles por el Gobierno Nacional.
La importancia de una buena labranza
Jones explicó que “el trabajo que se está realizando con el INTA es en función de lo que siempre se le recomienda al productor: que para obtener un buen producto tenemos que hacer un buen trabajo desde la base. Atendiendo a esta necesidad se comenzarán a realizar las labranzas de suelo en producciones bajo cubierta”.
En este sentido, desde el Mercado Concentrador subrayaron la importancia de realizar una correcta labranza para obtener mejores resultados en el cultivo, principalmente pimientos y tomates: “Si tenemos una buena labranza vamos a tener un buen desarrollo radicular, obteniendo unas plantas más sanas, más vigorosas y mayor y mejor producción en cuanto a los cultivos”.
Las primeras tareas en el suelo se desarrollarán con un rotocultivador perteneciente al INTA. Esta maquinaria permitirá demostrar al productor la simplificación del trabajo en un corto tiempo, obteniendo una óptima rotulación del suelo a un tamaño de partícula muy pequeña.
Además, el uso del rotocultivador facilitará la posterior instalación del sistema de riego y la colocación del polietileno en el suelo. “Nos deja una superficie totalmente nivelada y totalmente desintegrada, lo que nos permite lograr estos resultados que estamos esperando”, concluyó Jones.