Se trata de Jessica Currumil, quien luego de vivir con su padre, decidió instalarse en este sector de la ciudad, en condiciones de mucha precariedad. Currumil, beneficiaria de la nueva propiedad, con lágrimas en sus ojos, manifestó «me da mucha emoción poder tener nuestra propia casa para mí y mis tres hijos. Después de un matrimonio que no funcionó me instalé acá. Hice todo lo posible para poder tener mi propio techo. Vivía en un rancho de chapa y pasamos mucho frío. Así que estoy muy contenta por esta nueva vivienda».
Prioridades
El Municipio sigue manteniendo su gran contenido social como premisa, y a través de la Coordinación de Vivienda, logró construir un monoambiente, por intermedio de una cooperativa, lo que le posibilitará, a la nueva propietaria vivir en condiciones dignas junto a los menores. Héctor Castillo, a cargo de la cartera de Desarrollo Social, se mostró satisfecho con esta entrega, sobre todo «porque conocemos mucho la historia de esta familia, que venía con una problemática bastante compleja. Y en este sentido destacó la gestión y el apoyo del intendente Maderna.
«Nuestro Intendente ha marcado una diferencia en este sentido, seleccionado las prioridades muy en serio», resaltó.
Más entregas
En el mismo sentido, puntualizó «esta familia había sufrido varios intentos de incendios para que dejaran el terreno, y que hoy podamos estar entregando este monoambiente, dignificando su condición habitacional».
«Con la cooperativa de Ezequiel Agüero ya tenemos tres mejoramientos para entregar, que seguramente haremos antes de fin de año, lo que marca el modo en el que seguimos trabajando, y reitero el agradecimiento al Intendente por la confianza», agregó el funcionario.
Más adelante, Castillo enfatizó que es difícil poder hacer frente a la gran demanda con la que cuentan, desde su sector, pero «se sigue avanzando y entregando mejoramientos», siempre –según apuntó- «teniendo en cuenta que le entregamos solamente a las familias que realmente lo necesitan».