Alejandro Defranco se molestó por una nota sobre un fallo de la Cámara que integra, que impidió llevar a juicio a un abusador de dos menores y sólo le dio 30 horas de “trabajo comunitario”. Escribió en Facebook un comentario ofensivo contra la prensa.
El camarista de Trelew Alejandro Defranco utilizó ayer las redes sociales para cuestionar con dureza a la prensa por un artículo de este diario que generó una amplia repercusión –inclusive nacional-, que dio cuenta de un fallo de la Cámara Penal de Trelew que benefició a un abuelo abusador, al hacer lugar a la suspensión de un juicio a prueba y, en cambio, otorgarle una “probation” que consiste en 30 horas de trabajo comunitario.
el fallo de Defranco y los otros dos camaristas que lo firmaron, Adrián Barrios y Omar Florencio Minatta. Inclusive publicando extractos del escrito, sin emitir un juicio de valor y tratando de aportar elementos para que los lectores sacaran sus propias conclusiones sobre la información.
Sin embargo, a Defranco le molestó la trascendencia que se le dio. Más allá de la repercusion mediática, ayer hubo otra más importante y estrictamente judicial, cuando el Ministerio Público Fiscal de Trelew presentó un recurso de impugnación ante la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia de Chubut para que se revea la decisión de la Cámara y el acusado finalmente sea sometido a un juicio oral.
Enojado
Defranco, según se desprende de sus palabras, se molestó por la repercusión contraria al fallo que hubo, sobre todo en las redes sociales, y decidió escribir sobe el tema. A través de su cuenta de Twitter (@ale_defranco), escribió sobre la publicación y hasta le respondió a algunos usuarios que opinaron sobre el tema.
Pero los comentarios más duros los hizo en su perfil de Facebook, en donde escribió en términos descalificadores sobre la prensa e interpretó que la nota era una crítica “sin saber siquiera de qué se está hablando.”
Los textuales que a continuación se publican fueron corregidos para que el lector entienda mejor lo que quiso decir Defranco, ya que al texto original (que se publica en una imagen en esta misma página, le faltan acentos y hay conjugaciones verbales equivocadas, tal vez por el apuro con el que fue escrito: “Hay prensa independiente… hay prensa cara…. y hay prensa barata… qué es lo que ganan criticando fallos sin saber siquiera de que se está hablando?”, cuestionó Defranco.
Pero siguió en su crítica: “Prensa barata no puede analizar solo repite entre comillas sin siquiera opinar.. pero tendenciosa ella -la prensa barata- exalta las palabras que más ruido harían a mi mama, a mi abuela, al destinatario -que por creerlo idiota- le manipulan la opinión…”, disparó el magistrado desde su Facebook.
Y agregó sobre el final: “Si la prensa -la barata- hiciera una buena editorial generaría opiniones encontradas, tal vez, pero la prensa -la barata- sólo quiere imponerle -al destinatario que no puede pensar- su opinión sobre un caso que ni siquiera entiende… pero para la prensa -la barata- cree que vende más ejemplares porque su destinatario -el idiota- necesita que le explique cómo funciona el sistema que no le da seguridad… ay ay de ay… pobre horizonte empresarial”, concluyó Defranco su diatriba contra la prensa.