Delincuentes perforaron el portón de madera del garaje de una vivienda de la calle Huergo al 600 y se llevaron cuatro cajas de herramientas, un lavarropas y un bolso con indumentaria. Policías hallaron los elementos en una casa vecina y anoche esperaban allanarla para recuperar las cosas.
Dos albañiles que residen hace dos meses en una casa de la calle Huergo, al pie del cerro Chenque, se lamentaban anoche del robo que sufrieron. Al menos dos delincuentes, ayer poco antes de las 18, perforaron un reducido boquete con un hierro que dejaron abandonado en el lugar y se introdujeron a la casa para robar.
Se alzaron con cuatro cajas de herramientas, un lavarropas y un bolso con prendas de vestir de los habitantes del lugar. Los policías de la Seccional Primera se las ingeniaron para introducirse por el hueco y revisar el domicilio, debido a que no aparecían los damnificados. Ya se habían ido los ladrones y estaba todo revuelto.
Una vecina de la cuadra había escuchado ruidos extraños y alertó al Centro de Monitoreo del robo. Uno de los policías caminó sobre la ladera del cerro y observó que en el techo de una casa vecina había cajas de herramientas vacías. Uno de los albañiles las reconoció y por una de las ventanas se observaron todas las cosas robadas.
Para esto los ocupantes de esa casa ya se habían retirado, aunque minutos antes estuvieron observando los movimientos de la policía. En ese contexto, la policía solicitaba anoche una orden de allanamiento para recuperar los elementos sustraídos, y se esperaba que el juez de turno otorgara la diligencia.
El Patagónico accedió a la información de que uno de los sospechosos sería un adolescente que hace rato tiene a maltraer al sector céntrico del Rincón del Diablo, y que ahora vive en la vivienda donde estaban los elementos robados.