La situación recuerda a Alambrados de Veranada, la famosa canción de los hermanos Berbél: “…Le han puesto precio al pastaje y cercaron las aguadas, quise ser algo y soy nada, ya no es mío ni el paisaje…”.
Sucede que en zona cordillerana santacruceña se suscitó un pleito entre estancieros que acusan al multipremiado geólogo y oceanógrafo, Enrico Bonattu, un magnate italiano que no reside en Argentina y dueño de la estancia “Cancha Rayada”, de haber colocado “candado en la tranquera” ubicada sobre Ruta Provincial 31.
En una carta documento, el productor Daniel Aberastain, denunció que un terrateniente extranjero le impide acceder a su campo para llevarle nada más ni nada menos que comida a los peones.
Con esa maniobra, Aberastain dice que no tiene otra forma de llegar a su estancia, “La Josefina” y que por lo tanto no puede atender las necesidades básicas de los trabajadores.
“Debiendo imperiosamente proveer de víveres y combustible a mi personal es que solicito su inmediata intervención ante esta contingencia”, se lee en la carta documento que le mandó al Consejo Agrario de la Provincia.
Pero esto no sería todo, ya que el propietario de Cancha Rayada bloqueó el acceso al lago San Martín, un lugar con hermosos canales y pinturas rupestres con motivos de manos adultas y más allá, en otras rocas, figuras de manos de niños. Cancha Rayada está en el centro de la península y su paisaje es similar al del Parque Nacional Perito Moreno.
Según confirmaron fuentes del organismo provincial, las autoridades están hace dos meses en tratativas para destrabar el asunto, fundamentado el reclamo del Estado santacruceño en documentación sobre la disposición de esas tierras, sus caminos y la ilegalidad que significa cerrar el paso a las aguas que son de todxs. En este sentido, aseguraron que autoridades del organismo, lograron una audiencia con los representantes de las empresas de Bonattu en Buenos Aires, reunión que podría concretarse en los próximos días.
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