Esta semana, por intermedio de un operativo desplegado por la Municipalidad de Rawson, comenzó el traslado de los vehículos abandonados en la vía pública, en el marco del Programa Nacional de Compactación y Disposición Final de Automotores Abandonados o Secuestrados (PRONACOM), hacia el predio ubicado en inmediaciones al puesto policial de la ruta N° 25. Por ello, este viernes, el secretario de Gobierno y Coordinación de Gabinete, Nicolás Souza y la subsecretaria de Gobierno y Participación Ciudadana, Norma Cerrudo, entre otras autoridades, supervisaron esta labor, que también comprenderá otro tipo de chatarra.
Se trata de un trabajo en conjunto de la Secretarías de Obras Públicas; Gobierno y Coordinación de Gabinete; y Producción y Medio Ambiente. Las áreas trabajaron con antelación en un relevamiento de los vehículos abandonados y la chatarra dispersa en la vía pública en todos los barrios. Una empresa privada se encargará de la compactación de los vehículos y la chatarra y abonará un canon por cada tonelada recibida, el 80 por ciento de ese dinero será destinado a una institución de bien público de Rawson.
“Con el PRONACOM venimos trabajando desde hace un tiempo, y ya tenemos los primeros vehículos en el predio dispuesto detrás del puesto de control de ruta 25” detalló Cerrudo.
Relevamiento
La funcionaria comentó que “las tareas las iniciamos con un relevamiento previo de todos los autos abandonados en la vía pública que estaban dentro del ejido urbano de Rawson, luego procedimos a notificar a los dueños” y que “actualmente estamos armando una planilla que luego le vamos a remitir a Nación, para que, una vez que tengamos todo trasladado al predio, manden la compactadora”.
Además la subsecretaria municipal agregó que “hemos relevado aproximadamente unos 120 vehículos en condiciones de que sean retirados. La idea es continuar con este trabajo para que luego sean compactados y retirados del predio al cual los estamos trayendo. No tenemos una fecha de culminación del programa, seguiremos trasladando los vehículos y también otro tipo de chatarra para, de esta manera, dejar limpia la ciudad”.
Fin social
Cerrudo precisó además que “la chatarra se entregará a una empresa privada contratada por Nación, que es la que se encarga de la compactación, y esa misma firma abonará un precio por tonelada. El 80 por ciento de ese dinero va a ir directamente a una institución de bien público de nuestra ciudad”.