La Institución destinada a niños sordos, hipoacúsicos, ciegos, disminuidos visuales o con trastornos en el lenguaje celebró un acto en el cual participaron además la ministra de Educación, Graciela Cigudosa y la subsecretaria de Coordinación Técnica Operativa de Instituciones Educativas y Supervisión, Alejandra Von Poeppel. En el acto se descubrió una placa recordatoria donada por el Municipio.
La intendenta de Rawson, Rossana Artero, participó este jueves, junto a la Ministra de Educación Graciela Cigudosa, del aniversario de la Escuela 525, que cumplió 22 años de su creación y 20 desde que fuera definida como una escuela sensorial, ya que está destinada a niños sordos, hipoacúsicos, ciegos, disminuidos visuales, con trastornos en el lenguaje y dislexia.
En el acto, del cual participaron además la subsecretaria de Educación Alejadra Von Poeppel, la Secretaria de Familia Municipal Vanesa Freeman y el Director de Discapacidad Jorge Dorado, se brindaron reconocimientos a ex directores, auxiliares y ex docentes de la institución.
La intendenta Artero destacó la importancia de la institución en la comunidad, que ha permitido “atender la diversidad de una manera adecuada a través de la integración” y destacó a todos los actores de la comunidad educativa “porque tanto padres como maestros han luchado por conseguir esta escuela que es un verdadero espacio de encuentro, para el entendimiento, la socialización y el aprendizaje”.
Luego de compartir el agasajo, el director de Discapacidad municipal, Jorge Dorado resaltó el rol de los docentes “que llevaron a construir lo que es hoy la escuela 525 que alberga a chicos con discapacidades sensoriales en la continua búsqueda de igualdad de oportunidades, de un futuro con inserción laboral y vida plena”.
La Directora del Establecimiento Betiana Cravero agradeció a la intendenta municipal por la donación de una placa recordatoria que se colocó en el acceso a la institución, y contó que “En los inicios, la escuela se creó como una escuela de sordos y pasados dos años se incorporaron ciegos y de baja visión que no contaban con escuelas en la zona y tenían que viajar a Trelew para poder ser educados”.
Cravero detalló además que “en este momento son alrededor de 70 alumnos los que están incluidos, es decir que no reciben la educación en nuestro establecimiento sino que asisten a diferentes escuelas comunes de los 3 niveles, incluso tenemos estudiantes en la universidad del Chubut a los que ayudamos y acompañamos su trayectoria proveyendo materiales adaptados”.