El magistrado Alejandro Rosales se retiro para analizar la prueba luego de escuchar los alegatos finales de las partes en el marco del juicio realizado Daniel Héctor Quiduleff (24), acusado como presunto autor de los delitos hurto, desobediencia y robo. Asimismo, indico que el martes 14 dará lectura a su resolución judicial. La fiscal Andrea Vázquez solicito que se imponga al acusado la pena de 1 año y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo. En tanto, el defensor público Gustavo Oyarzun requirió la absolución de su asistido o que se le aplique el mínimo de la pena.
En la sala de audiencias de la oficina judicial se desarrollo la tercera jornada de juicio contra Daniel Quiduleff. El acto judicial es presidido por el juez Alejandro Rosales. La fiscalía estuvo representada por la fiscal Andrea Vázquez y la funcionaria Rita Barrionuevo. El acusado, recibe el asesoramiento legal del abogado adjunto de la Defensa Publica, Gustavo Oyarzun.
Alegatos finales
Vázquez inicio su alegato final desarrollando las circunstancias referidas al delito de desobediencia, por el que Quiduleff, fue denunciado el 18 de abril del año pasado. En este sentido, la fiscal, considero que se logro probar – con la certeza que exige esta etapa procesal- que el acusado es autor de la imputación realizada por el Ministerio Publico Fiscal.
Para ello, sostuvo que testimonio de una empleada policial, que cumple funciones en la comisaria de la mujer, quien confirmo que el imputado estaba debidamente notificado de la orden judicial, dictada por el juez de familia, Gustavo Antoun. Esa disposición, establecía que Quiduleff tenía prohibido ponerse en contacto y acercarse a su ex pareja, por un plazo de 60 días.
Asimismo, repaso los testimonios de los policías que atendieron el llamado telefónico de la víctima y los que encontraron a Quiduleff, cuando estaba dando golpes de patadas y puño, en la puerta de la vivienda de la mujer, que realizo el pedido de ayuda a la comisaria.
Con respecto a la tentativa de robo, a una carnicería ubicada sobre calle Alberdi entre España y Perito Moreno, la investigadora aseguro que mediante la producción de la prueba documental y testimonial, se logro probar que el 12 de abril del 2018, a las 04:10, Quiduleff y otra persona-no identificada- rompieron el vidrio de una ventana del local comercial.
En este marco, destacó que una testigo afirmo ante el juez, que identifico a Quiduleff en ese lugar. Por ello, dio aviso telefónico al dueño de la carnicería y a la policía, cuando escucho el ruido de la rotura de vidrios. Esto permitió que el imputado fuera detenido, cuando intentaba escapar por calle España, en inmediaciones de la sucursal del Banco Nación.
Por último, la representante de fiscalía, afirmo que la investigación penal permitió probar que el 21 de octubre del 2017, Quiduleff ingreso sin autorización, al patio de una vivienda ubicada sobre calle Perito Moreno entre Avenida Ingeniero Coronel y Ameghino. Allí sustrajo una máquina para cortar césped. Unos minutos después, regreso al lugar del hecho. Esta vez, intento entrar al interior de la camioneta del damnificado.
En este marco, señalo que las evidencias rendidas en el debate prueban la teoría del caso. A ello agrego la contundencia de los testimonios de los vecinos, que observaron al acusado cuando intentaba sustraer elementos de la camioneta del damnificado. También el registro fílmico de una cámara de seguridad, y los mensajes de texto que Quiduleff envió entre las 07:35 y las 07:55, de esa mañana.
En tal sentido, refirió que Quiduleff escribió desde su teléfono, dos mensajes en los que decía » Tengo una sorpresa para vos. te voy a llevar una maquina. 700 pesos. La hice ¿hacemos negocio?'».
Finalmente, la investigadora recordó la sentencia dictada por el ex juez Roberto Casal, en el año 2017, en la que condeno a Quiduleff a la pena de tres años de ejecución condicional por los delitos de daño, violación de domicilio y robo. En consecuencia, peticiono al tribunal que declare al acusado autor penalmente responsable de los delitos endilgados, y le imponga la pena de un año y medio de prisión de cumplimiento efectivo.
A su turno, Oyarzun alego que en el caso de la investigación por el robo a la carnicería, la escena del hecho había sido modificada por el accionar del personal policial. En este contexto, solicito la absolución de su asistido.
Con referencia al delito de hurto de la máquina de cortar césped , realizo un pedido de nulidad del testimonio e informe, de un integrante de la brigada de investigaciones. También considero que no había pruebas de cargo contra el acusado.
Respecto del delito de desobediencia, considero que no puede ser juzgado por la justicia penal. Así las cosas, peticionó la absolución de Quiduleff de todas las imputaciones, o la aplicación del mínimo de la pena fijada por el Código Penal.
Luego de escuchar los pedidos de las partes, Rosales indico que se retiraba para analizar la prueba y elaborar su resolución. La próxima audiencia, fue fijada para el 14 de mayo a las 12:00.