Así surge de un informe de Bank of America a clientes, donde destaca la estabilidad cambiaria y baja de la inflación. Sin embargo, siguen con preocupación las encuestas.
Una serie de shocks externos e internos están jugando a favor de las principales variables financieras locales. Así lo refleja un informe que Bank of America, una de las principales entidades norteamericanas, distribuyó a los clientes. El título es contundente: «Los planetas se alinean a favor de la Argentina».
El reporte deja en claro el efecto que la tranquilidad cambiaria está generando entre los inversores internacionales. «Estos factores que juegan a favor de la Argentina tienen un impacto directo en la estabilidad del dólar y la mejora en general de las variables financieras, incluyendo una disminución de la inflación», que seguiría bajando en los próximos meses.
Pero, ¿cuáles son concretamente esos «impactos positivos» que estarían influyendo en una mejora de las condiciones financieras del país? Bank of America enumera los siguientes:
Factores externos:
– Posible baja de tasas en Estados Unidos y en Europa. En las últimas semanas aumentó sensiblemente esta posibilidad. Los inversores prácticamente descuentan una reducción por parte de la FED en septiembre y la tasa a 10 años del Tesoro americano cayó al 2% anual. Esto aumenta la búsqueda de oportunidades en mercados emergentes y la Argentina genera cierto atractivo con rendimientos muy altos.
– Precio de las materias primas. Luego de que la soja cayera por debajo de los U$S 300 se produjo un salto bastante notable en los últimos 30 días (14% desde el piso), al igual que otros commodities. Esto también es algo que beneficia a los emergentes, que en general exportan productos primarios. Este fenómeno también alentó la apreciación de las monedas locales contra el dólar.
– Brasil. Las perspectivas financieras han mejorado en forma notoria, en parte por el avance en la reforma previsional. Desde el 20 de mayo, el real se apreció 6,2%. Esto también resultó clave para la recuperación del peso.
Factores internos
– Apoyo del FMI para la intervención con reservas. Sin lugar a dudas, sostiene el BoFA, fue el principal aspecto que impulsó la mayor estabilidad cambiaria. El Banco Central fue autorizado a fin de abril a vender dólares aún si el tipo de cambio se encuentra dentro de la «zona de no intervención». «El cambio de postura del Fondo sobre este tema se dio cuando aparecía como un peligro cierto que el tipo de cambio superase el techo de la banda y dejara sin ancla las expectativas inflacionarias».
– «Efecto Pichetto». El banco lo denomina efecto «MAP» (Miguel Ángel Pichetto). La decisión de Mauricio Macri de designar a un peronista como compañero de fórmula impulsó sobre todo los precios de las acciones e hizo retroceder el riesgo país, aunque en los últimos dos días volvió a rebotar hasta acercarse a los 900 puntos. «Si Macri es reelegido, Pichetto será una pieza clave para negociar con los gobernadores y el Congreso», es decir en aumentar la gobernabilidad.
– Cristina vicepresidenta. «Las políticas del kirchnerismo podrían ser más moderadas si Alberto Fernández llega al poder. Esto reduce la percepción negativa de ese escenario».
Sin embargo, la entidad reconoce que esta mejora de las variables financieras por ahora no se traduce en una recuperación de la economía real. «La reactivación es más lenta de lo esperada por los elevados niveles de tasa de interés y el aumento del desempleo».
Por otra parte, también resalta que la franca mejora de los activos argentinos refleja que los inversores ven mayores probabilidades de que gane el Gobierno. «Sin embargo, las encuestas aún son muy ajustadas, por lo que no hay tanta claridad sobre este punto», lo que explicaría al menos en parte el repunte del riesgo país de las últimas 48 horas.
Infobae