En un superdomingo electoral, donde las provincias de Jujuy, Chubut, Entre Ríos y Tucumán eligieron gobernador; y Mendoza dirimió a sus candidatos en las PASO, las particularidades de la jornada estuvieron a la orden del día.
Desde boletas apócrifas y votantes centenarios que acudieron igual a las urnas para ejercer su derecho cívico hasta los bloopers de algunos políticos y hechos policiales que tuvieron a varios gendarmes en la mira.
En Mendoza, la precandidata del Frente de Izquierda y los Trabajadores, Noelia Barbeito, se olvidó el DNI cuando fue a votar. La referente del FIT se presentó a primera hora en la Escuela Osvaldo Borghi del Barrio Cano de la capital y, a pesar del descuido, le permitieron sufragar igual.
El peronista Alejandro Bermejo fue otro de los precandidatos mendocinos que asistió temprano a votar y se llevó todas las miradas al salir del cuarto oscuro. El intendente de Maipú se hizo eco del reclamo de los integrantes del Centro Tradicionalista Martín Fierro, que asistió a las urnas reclamando que se respeten nuestras tradiciones, y se dejó fotografiar arriba de uno de los caballos de la institución.
A media mañana, las autoridades de la mesa 27 del colegio Patricias Mendocinas de Ciudad se encontraron con una situación inusual. Al parecer, un votante «alteró» unas boletas y las cambió por sus originales cuando ingresó al cuarto oscuro. Los papeles mostraban al candidato a gobernador por Cambia Mendoza Rodolfo Suárez, junto a los candidatos a intendente y concejales de Ciudad por la lista del otro candidato, Omar De Marchi, simulando pertenecer a la misma boleta unidas por pegamento.
En Tucumán, el verdadero protagonista de la jornada fue un anciano de 97 años que, a pesar de no tener la obligación de participar de la elección, se presentó igual. Acompañado de un policía y sostenido por su bastón, Emilio Buabse se llevó un fuerte aplauso de las autoridades de mesa y de todos los presentes al depositar el sobre en la urna.
La contracara de este emotivo momento, fue un hecho policial tiñó con sangre la elección en Tucumán. Un gendarme que custodiaba las urnas en la secundaria El Colomer fue baleado por dos delincuentes horas antes del inicio de la votación. Todo ocurrió cuando el efectivo realizaba un recorrido por el establecimiento y se topó con esas personas que merodeaban dentro del lugar con fines de robo. Le dispararon a sangre fría y le robaron su arma reglamentaria. El gendarme permanece internado pero fuera de peligro.
Esta provincia norteña también fue protagonista de un hecho insólito: una presidenta de mesa se llevó la urna al baño cuando le dieron ganas de hacer sus necesidades. «Por necesidades fisiológicas, la presidente de mesa de una escuela, se llevó la urna al baño pensando que eso era posible. Al detectarlo, la delegada de la Junta de esa escuela, la reemplazó de inmediato por el suplente de otra mesa», explicó Carlos Amaya, el vocero de la Junta Electoral tras el revuelo que se armó en torno a esta inusual situación.
En Chubut, los gendarmes también fueron protagonistas de la jornada. En este caso, por prohibirles trabajar a un grupo de periodistas que cubrían las elecciones en las escuela 53 y 173 de Trelew.
Tras la denuncia de este hecho, el Comandante Darío Luis Pellerano, jefe de la Agrupación Chubut de Gendarmería Nacional, relevó de su cargo a los gendarmes responsables.
«Dentro de las directivas impartidas al personal, una fundamental era que los periodistas podían ingresar, podían trabajar en forma libre, siempre que no entorpezcan la elección o no entren al cuarto oscuro; en ningún momento que tenían que pedir documentos datos, el periodismo trabajar en forma libre» dijo Pellerano.
En Entre Ríos se produjo una situación similar a la de Tucumán, donde una mujer de 100 años le pidió a su familia que la llevara hasta la ciudad para emitir su voto. Se trata de Verónica Gebarth de Weinzetel, quien se dejó fotografiar a la salida de su casa de campo con una sonrisa en la localidad de Aldea de Salto.
Jujuy tampoco quiso quedarse afuera de esa tendencia y un abuelo de 94 años, que no se perdió ninguna elección, se presentó pasado el mediodía en la escuela pública 4521 del barrio Alto Comedero. «Espero me dé el carrete para una próxima votación», bromeó Alberto Volterri.
Hace menos de una semana su casa fue una fiesta, con sus hijos, nietos y bisnietos recibiendo sus 94 años, que lo encuentran en perfecto estado de salud y discutiendo, como en cada ocasión, sobre cuál de todos los candidatos era el apropiado al momento de emitir el voto, porque pese a que la ley obliga a que todas las personas lo hagan al menos hasta los 70 años, a él nunca se le pasó por la cabeza esa posibilidad.
«Nunca dejé de votar, espero me dé el carrete para volver en las próximas «, afirmó, muy seguro en sus palabras, mientras sonreía a cada uno de los que lo reconocían y lo saludaban. Sin embargo, su pasión por el fútbol no la pudo dejar de lado y consultado sobre qué era lo mejor para Jujuy, aseguró: «Que al ‘Lobo’ (Gimnasia de Jujuy) le vaya bien».
infobae