La definición de clausurar el calabozo fue tomada hace unos días por el juez José Colabelli, pero la Unidad Regional de Policías de Esquel estaba trabajando en una contrapropuesta para que las reparaciones se realicen sin mudar a todos los internos. Sin embargo el suceso del jueves que protagonizó un detenido apuró la definición de los traslados hacia otros lugares.
El Jefe de la Unidad Regional Esquel, comisario mayor Rodolfo Hess, sostuvo que «había un total de 13 detenidos, el máximo permitido. Eran diez detenidos, un procesado que había ingresado, más dos detenidos federales por la causa de un allanamiento».
«La resolución la adopté con disgusto porque la idea con la plana mayor era que los detenidos de la zona continúen en los alrededores, pero eso resultó imposible por la capacidad de alojamiento al límite», señaló a Fm Sol.
Además aclaró que «la solución fue trasladar a dos condenados a la Alcaidía de Comodoro, otros dos a la Alcaidía de Trelew y tres detenidos a dependencias que tuvimos que acondicionar».
Tal como destaca EQS Notas, los restantes podrían permanecer en el lugar, en el único calabozo que podría mantenerse en uso, mientras arreglan el resto del lugar.