El amplio triunfo de Alberto Fernández en las PASO sorprendió a muchos, pero sobre todo a empresarios que habían apostado por Mauricio Macri. El resultado de las primarias impactó en el financiamiento electoral del Presidente: a pesar de que en las elecciones generales suelen movilizar cantidades mayores de dinero, la fórmula Macri-Pichetto recaudó $43 millones menos entre empresas en comparación con las PASO.
Juntos por el Cambio informó que recibirá $67 millones en concepto de donaciones de compañías para la campaña presidencial de octubre, según se desprende del informe preliminar de financiamiento que entregaron ante la Justicia Electoral. Esos números quedaron lejos de aquellos $110 millones que el Presidente sumó entre grandes compañías de cara a las PASO.
El Frente de Todos, en cambio, sumó nuevos aportes tras la victoria en las primarias, pero aun así no pudo superar al oficialismo. La oposición proyectó que recibirá donaciones por $41 millones de empresas para la campaña, una cifra en ascenso que obedece al impulso de las urnas, pero también a una táctica más agresiva. Consumado el triunfo de las PASO, desde el entorno de Alberto Fernández decidieron tocar la puerta de las compañías que ya le habían donado al oficialismo. Y -sostienen- tuvieron buenos resultados.
El principal donante de la fórmula Macri-Pichetto es el Grupo General Deheza (AGD), cuyo referente es el exsenador peronista Roberto Urquía. El holding desembolsó hasta ahora $12 millones a través de las firmas Niza ($9 millones) y Establecimientos Agropecuarios La Paz ($3 millones), según se desprende del informe oficial. A esa cifra hay que sumarle otros $10 millones que el Grupo AGD ya aportó para las PASO en favor de Juntos por el Cambio.
Las empresas de AGD fueron algunas de las firmas que recibieron cartas, mails y llamadas desde el entorno de Alberto Fernández. Urquía ya conocía al candidato: lo había recibido en su planta de Córdoba incluso antes de las PASO y después de las internas el empresario organizó un evento -almuerzo incluido- en la Fundación Mediterránea de Córdoba.
Esa hospitalidad de las últimas semanas habría de traducirse en financiamiento, una donación de $9 millones por parte de Aceitera General Deheza que se haría pública en los próximos días, informaron cerca de Alberto Fernández. LA NACION intentó contactarse ayer, sin éxito, con el empresario para consultarlo sobre esta información.
Urquía no fue el único empresario que se acercó al candidato opositor después de apoyar la campaña del Presidente. Tras las PASO, Marcelo Mindlin (Grupo Emes) y Marcos Galperín (Mercado Libre) se reunieron a solas con Alberto Fernández. Macri, por su parte, faltó al Coloquio de IDEA, el encuentro más importante de empresarios locales (aunque participó por videoconferencia). Los desencuentros con el empresariado habían empezado hace dos semanas, cuando el Presidente asistió al foro de la Unión Industrial Argentina (UIA), pero el titular de esa entidad se retiró antes de su discurso.
«Por suerte hacemos una campaña mucho más austera que la de las PASO», afirmaron desde el oficialismo. Y aclararon que la mayoría de los fondos fueron recaudados antes de las primarias y que Juntos por el Cambio los administró entre los dos comicios.
La composición del mundo de aportantes de Juntos por el Cambio es similar a la de las PASO: la agroindustria sigue siendo el principal financista, seguida por el sector financiero. En ese rubro figura, en el informe preliminar, Compañía de Inversiones Generales (Coinge), de la familia Miguens Bemberg, quienes también integran el directorio de Central Puerto, emprendimiento del que participa Nicolás Caputo.
Por ahora el Frente de Todos dio vuelta pocas cartas sobre quiénes financian su campaña. Castello Mercuri SA, un bróker de seguros con sede en Puerto Madero, desembolsó un millón de pesos. Alberto Fernández conoce el sector porque fue superintendente de Seguros de la Nación durante el menemismo, pero desde su entorno aclararon que fue un aporte voluntario.
La otra de las compañías que apoyaron al candidato opositor es Aluar SA, la única firma que donó dinero para los dos principales partidos en las PASO. Esta vez volvió a desembolsar $900.000 en favor de la fórmula Fernández-Fernández. Por ahora la compañía no aparece en la nómina de Juntos por el Cambio. Los últimos dos aportantes son Los Mellizos Panificados SRL, una empresa tucumana que donó $700.000, y la firma metalúrgica Ferrosider SA, que aportó $500.000.