Se trata de Carlos Barbato. Esta semana se formalizó la investigación en su contra. El mismo día del hecho, Barbato realizó otra denuncia cruzada en Trelew.
En las últimas horas se formalizó la investigación fiscal en relación a un hecho que tomó relevancia pública por sus protagonistas y que ocurrió el 16 de junio en Corcovado, pero la denuncia fue presentada en la Comisaría de la Mujer de Gaiman. El mismo día, el denunciado por presunta violencia de género, Carlos Barbato, realizó una denuncia cruzada en Trelew. Tiempo después las actuaciones fueron enviadas a la Fiscalía de Esquel por corresponder a esta jurisdicción el lugar del hecho.
El pasado viernes, mediante el sistema de videoconferencia, el imputado, acompañado por su abogado defensor Fabián Gabalachis, tomó formal conocimiento del hecho que se investiga en su contra comunicado por el funcionario Carlos Richeri, en presencia de la víctima. La audiencia fue presidida por el juez José Luis Ennis.
El Hecho
De acuerdo a lo informado por el Ministerio Público Fiscal este jueves, era de madrugada, aproximadamente las 3.00 horas cuando la pareja estaba en la cabaña en la que se habían alojado. El imputado había compartido una cena con su grupo de trabajo, entre los que estaba la víctima, y al regresar a la cabaña discutieron. Según la denuncia, él le hacía reproches por celos, comenzó a insultarla y a golpearla. Mientras lo hacía le ordenó callarse amenazándola con matarla si no lo hacía. Habría empleado golpes de puño y patadas, en una secuencia repetida varias veces, según detalló la fiscalía.
La mujer alcanzó una planchita del pelo y le pegó en el rostro a Barbato para defenderse, pero el acusado continuó con las agresiones físicas y verbales, hasta que escuchó que ingresó gente a la cabaña y se detuvo, diciéndole: “mirá cómo me dejaste la cara, hija de puta, te voy a echar a vos y a tu hermano».
A raíz de la agresión física descripta, la víctima sufrió lesiones en su cuerpo de carácter grave por generar una inhabilidad laboral mayor a 1 (un) mes: hematomas varios en miembros superiores e inferiores, que oscilan entre los 3 y los 10 cm, otro en región infra clavicular, en región lateral derecha del cuello, y en región parieto temporo occipital derecha y fractura de la quinta costilla izquierda en su arco dorsal o posterior.
“El evento descripto ocurre en el marco de la relación de pareja entre el imputado y la víctima, en la que ella era agredida por su condición de mujer, aprovechándose el agresor de su rol de superioridad por ser su jefe, para ejercer actos de dominación y control sobre ella, utilizando medios violentos para dicho fin”, describió Richeri.
El hecho fue calificado provisoriamente como lesiones graves agravadas por la relación de pareja y por haber ocurrido en contexto de violencia de género en concurso real con amenazas, por lo que deberá responder el imputado en carácter de autor, informó ADNSur.