El Gobierno acelera con el ambicioso cronograma para lanzar la oferta por la deuda. En ese orden, una de las primeros temas a resolver tiene que ver con los bancos que trabajarán con Martín Guzmán y la Unidad de Sostenibilidad de la Deuda Pública Externa, comandada por Lisandro Cleri.
Precisamente en la primera semana de febrero, según los tiempos que se puso Economía, tenían que enviar la invitación formal a los Agentes de Información, Asesores Financieros y Bancos Colocadores / Agentes de Distribución para que presenten ofertas.
La elección de esas entidades se conocería a partir de la segunda semana de febrero pero que se extiende hasta la cuarta. Si bien no trascendieron los nombres de todos los posibles candidatos, hay uno en particular que resaltó y que -según versiones del mercado– ya tendría virtualmente cerrada su participación.
Sería una histórica entidad francesa que nació en 1810 en París: Rothschild. Este banco de inversión que se especializa en reestructuraciones de deuda y banca privada tiene el apoyo de un jugador no menor en la agenda internacional de la que participó recientemente el presidente Alberto Fernández.
Sucede que Emmanuel Macron, el actual mandatario de Francia fue socio en Rothschild en 2008 y duró allí cuatro año. ¿Casualidades? Nadie lo sabe. Por lo pronto, en la reciente reunión entre Fernández y Macron se vieron muy en sintonía.
«Francia está interesada especialmente en que a la Argentina le vaya bien», dijo Macron. Alberto y su par galo intercambiaron regalos tras la comida que ambos compartieron en París. El presidente francés le obsequió una guitarra, mientras que el argentino retribuyó con las obras completas de Jorge Luis Borges.
«Francia acompañará y se movilizará con el Fondo Monetario Internacional y con otros socios para ayudar a la Argentina a volver al camino del crecimiento de una deuda sostenible», enfatizó Macron.
De todas formas, Rothschild -según se dice en los bancos- también habría ganado puntos por la incorporación, a finales de septiembre del año pasado, de Eric Lalo como managing director y jefe de asesores para soberanos. Venía de una entidad ya conocida por el peronismo como Lazard, quien participó del canje del 2005.
«Es una entidad que no tiene mucha presencia global y por eso llamó la atención. Pero el rumor crece y pareciera que tiene un lugar asegurado», indicaron fuentes del mercado. iProfesional le consultó a la prensa del ministerio de Economía acerca de este tema pero no obtuvo respuesta.
De todas formas se dice en el mercado que Rothschild no irá sólo e incluso la propuesta al Gobierno viene con una pata local. Sería un encumbrado economista de la Argentina como nexo, si bien Lalo sería la persona que negocia con el equipo económico.
Además de Rothschild, que iría como asesor en la reestructuración, también habría otras entidades que participarían en otras áreas como colocadores o agentes de información.
Ahí suenan las clásicas entidades como algunas estadounidenses: el Citi y Bank of America pero se dejaría afuera al JP Morgan, una de las más «pegadas» a los funcionarios del macrismo. Habría preponderancia de bancos europeos.
Lo cierto es que el Gobierno empieza a acelerar porque la hoja de ruta dispuesta por Guzmán es muy acotada. En los papeles, la clave en lo inmediato estará en el análisis de Sostenibilidad de la Deuda que será la base para la oferta de la deuda argentina. Eso se producirá la semana que viene.
Después de eso, se inicia el período de 10 días de reuniones e intercambio de visiones con tenedores de la deuda pública externa sobre la base de los lineamientos del Análisis de Sostenibilidad.
Finalmente en marzo es la fecha decisiva para el país. En la primera semana se determinará la estructura final de la oferta y en la segunda se presenta. Todo esto, y con final feliz, debería estar cerrado para finales de marzo, informó IProfesional.