Una médica china que alertó a otros colegas sobre la propagación del coronavirus hace tres meses desapareció en los últimos días y, según los medios locales, el gobierno podría haberla detenido por «hablar» sobre la pandemia.
La doctora Ai Fen reveló que se enfrentó a presiones «extremadamente duras y sin precedentes» por parte de funcionarios del Hospital Central de Wuhan después de compartir una foto sobre un informe de un paciente etiquetado como «coronavirus del SARS».
La ahora desaparecida también publicó en WeChat un informe extenso, en el que incluía el caso de Li Wenliang, de 34 años, el médico que también advirtió sobre la aparición de un nuevo brote y murió por coronavirus.
Ai contó que hasta puso en conocimiento a su jefe que un paciente presentaba síntomas de lo que podría ser un tipo de SARS, pero fue ignorada. «Vimos a más y más pacientes entrar a medida que el radio de propagación de la infección se hizo más grande», contó en la entrevista a Renwu.
Y agregó que al mismo tiempo que ella sabía que la transmisión era «de humano a humano», el país lo negaba. Lo cierto es que ahora nadie sabe del paradero de la doctora y muchos de sus colegas o fallecieron por la enfermedad o simplemente se niegan a hablar.