El Parlamento francés dio su última luz verde al proyecto de ley para prorrogar hasta el 10 de julio el estado de emergencia sanitaria por el coronavirus, luego de que diputados y senadores alcanzaran un acuerdo sobre los puntos más controvertidos del texto.
Con 252 votos a favor y 87 en contra, la iniciativa fue aprobada primero por el Senado, dominado por la oposición conservadora, para luego ser validado a mano alzada en la Cámara baja, donde una escisión en el oficialismo amenaza con dejar al gobierno sin la mayoría parlamentaria.
Tras la aprobación final, el presidente de la Cámara alta, el conservador Gérard Larcher, anunció que consultará al Consejo constitucional para asegurarse que las medidas son «necesarias y adaptadas a las circunstancias», reportó el diario Le Figaro.
Desde hace días, el proyecto había sido fuente de polémica entre la oposición y el oficialismo en las dos cámaras parlamentarias por divergencias sobre la responsabilidad penal de las autoridades en el desconfinamiento previsto por el gobierno a partir del lunes.
Un punto de tensión particular era el caso de los intendentes, quienes serán los responsables directos de la reapertura de las escuelas; una medida criticada por algunos opositores por considerarla prematura.