El presidente argentino, Alberto Fernández, encabezó este miércoles una nueva reunión del Consejo Federal Argentina Contra el Hambre, que integran autoridades políticas y representantes de diversos sectores de la sociedad, en la que se renovaron medidas contra esa problemática y se recibió el apoyo del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Según informaron fuentes de la Presidencia, el organismo concedió al país un crédito de 300 millones de dólares para el financiamiento de tarjetas para compra de alimentos que se entregan entre los sectores más vulnerables, que se suma al préstamo aprobado por la misma suma en 2020.
«Quiero agradecer a CAF porque nos ha ayudado muchísimo el año anterior, cuando financió 300 millones de dólares y éste nos está destinando otros 300 millones de dólares que son centrales para lograr los objetivos que queremos alcanzar», señaló Fernández en la primera reunión en 2021 del consejo contra el hambre.
Antes del encuentro, en el que el presidente y sus principales colaboradores conectaron con el resto de participantes de forma virtual, el jefe de Estado se había reunido con el titular del CAF, Luis Carranza Ugarte.
EL COMPROMISO DE ACABAR CON EL HAMBRE
Al llegar al poder en diciembre de 2019, el político peronista anunció la puesta en marcha del Plan Nacional Argentina Contra el Hambre, con el fin de atender la emergencia social y económica del país, que inició una recesión en 2018 que aún continúa y que se ha agravado por la pandemia del coronavirus, con más del 40 % de la población bajo la línea de pobreza.
Dentro del plan está la llamada Tarjeta Alimentar, destinada a las madres y padres con hijos de hasta 6 años que ya estén recibiendo la Asignación Universal por Hijo -ayuda mensual a padres desocupados o con trabajos informales por hasta 5 hijos menores de 18 años-.
También a embarazadas a partir de los 3 meses que también reciben subsidios y personas con discapacidad en la misma situación vulnerable.
Hasta el momento, el Gobierno ha emitido más de 1,56 millones de tarjetas.
«Queremos ratificar el compromiso de CAF con la Argentina en general y con este programa en particular. Es un honor y un privilegio ser socios del Gobierno en este esfuerzo integral que apunta a romper con la transmisión intergeneracional de la pobreza”, dijo Carranza Ugarte, según un comunicado de la Presidencia.
AUMENTO DE LOS MONTOS MIENTRAS SUBEN LOS PRECIOS
En la reunión del Consejo Federal, que integran autoridades políticas y representantes de organizaciones sociales, religiosos, empresariales y sindicatos, el presidente dijo que el Estado va a seguir presente para auxiliar a quienes más lo necesitan.
«Estamos preocupados y ocupados de los que más lo necesitan, de los que están en peor situación. El Estado va a seguir presente para auxiliarlos en este momento de expansión económica pero que tal vez no necesariamente los alcanza», señaló.
Desde el tercer viernes de este mes, el monto que se depositará en la Tarjeta Alimentar para familias con un hijo pasará de 4.000 a 6.000 pesos (45 dólares) y para quienes tengan más de un hijo será de 6.000 a 9.000 pesos (101 dólares).
Fernández se mostró preocupado por el costo de los alimentos -Argentina acumuló en 2020 una inflación del 36,1 %, la segunda de Latinoamérica sólo superada por Venezuela- y criticó que la «oportunidad de desarrollo se convierta en un aumento de precios”.
«Mi reclamo al retorno de la ética también tiene como destinatario al que produce, porque el primer compromiso tiene que ser con la sociedad en la que se desarrolla», afirmó.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, especificó que en 2020 se amplió la cobertura alimentaria de 8 millones a 11 millones de personas.
Del encuentro participó también el premio Nobel de la Paz 1980, Adolfo Pérez Esquivel, quien aseguró que se está «haciendo un gran esfuerzo frente al desafío de superar la pobreza».
«La inflación, los altos costos y la especulación financiera hay que enfrentarlos con coraje, no solo desde el ámbito gubernamental, sino desde la sociedad», sentenció.