Sin embargo, tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) apoyan al uso del antídoto.
Varios países suspendieron la aplicación de la vacuna contra el coronavirus (Covid-19) desarrollada por el laboratorio británico y la Universidad de Oxford, AstraZeneca, por la aparición de coágulos de sangre en personas inmunizadas con este inyectable. Sin embargo, tanto la Organización Mundial de la Salud ( OMS) como la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) apoyan al uso del medicamento.
¿Que países cancelaron la aplicación?
El pronunciamiento de la OMS y EMA fue en respuesta a la decisión de:
Austria
Estonia
Lituania
Letonia
Luxemburgo
Dinamarca
Islandia
Noruega
Italia
Austria había anunciado que había dejado de administrar un lote de vacunas del laboratorio tras la muerte de una enfermera de 49 años que sufrió «graves problemas de coagulación» pocos días después de recibirla.
Otros cuatro países europeos: Estonia, Lituania, Letonia y Luxemburgo, suspendieron inmediatamente después la vacunación con dosis de este lote, que se entregó a 17 países y que incluía un millón de vacunas, e Italia, que no recibió vacunas de esa partida, también suspendió el jueves la aplicación, reseñó la agencia de noticias AFP.
Trombosis: casos registrados
Según la EMA, sólo se señalaron hasta el martes último 22 casos de trombosis entre los tres millones de personas vacunadas en la Unión Europea (UE), así como en Noruega e Islandia, que participan en la estrategia común de vacunas.
La autoridad sanitaria danesa dijo contar con «informes de casos graves de formación de coágulos de sangre» en personas vacunadas, pero precisó que no podía confirmar por ahora una relación causal.
Por su parte, una vocera del organismo sanitario de la ONU en una conferencia de prensa desde Ginebra, Margaret Harris, declaró: «Sí, deberíamos continuar utilizando la vacuna» de AstraZeneca, «no hay razón para no utilizarla».
En tanto, la EMA instó a los países del bloque a avanzar con la aplicación de la vacuna de AstraZeneca, porque “los beneficios continúan superando los riesgos”.