Por lo que había vociferado este polémico personaje en uno de los medios en el que viven promocionándolo, a cambio de una jugosa pauta de publicidad oficial, iban a venir a Puerto Madryn “ministros y secretarios de Seguridad, como también las cúpulas policiales de las provincias de La Pampa, Buenos Aires, Neuquén, Rio Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego”. También había asegurado que participaría de “la cumbre” Sergio Berni, el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, pero nuevamente Massoni quedó como un charlatán.
Su “circo” –que le iba a demandar un gasto millonario a la provincia– fracasó y él demostró que no es capaz de organizar ni un cumpleaños.
La figura de Massoni está cayendo en el descredito, y eso quedó demostrado en Madryn el jueves 25 y el viernes 26 de marzo con la ausencia de la mayoría de los que él había invitado al congreso contra el narcotráfico, del que supuestamente saldrían ideas para una lucha en conjunto contra el negocio de las drogas.
Uno de los cercanos al controversial ministro de Seguridad de Chubut calificó todo como “un fiasco” y confió que la policía había armado un dispositivo especial para custodiarlo a Berni, del que a último momento se debió desistir ante la ausencia del funcionario bonaerense.
¿Qué seriedad puede haber con el tema narcotráfico, en una provincia en la que el subjefe de Policía tiene probados vínculos con un narcotraficante condenado a 9 años de prisión, por intentar traficar más de 100 kilos de cocaína a España? ¿Cuán creíble puede ser un ministro que dice que va a terminar con el negocio de las drogas, sentado al lado del amigo de un narcotraficante?
Massoni antes de organizar una cumbre contra el narcotráfico debería echar a “El Tero” Gómez Ocampo de su cargo como subjefe de la policía de la provincia y dejar de protegerlo para que en la Justicia, de una buena vez, lo investiguen por las tropelías que le atribuyen en su oscuro pasado.
La sociedad chubutense no se merece tener en lo más alto de su policía a un despreciable sujeto vinculado a un narcotraficante, denunciado por maniobras delictivas con dineros públicos o con sospechas de estar relacionado a la trata y la prostitución VIP en Madryn.
Quizás fue esto algo de lo que contribuyó a que el congreso de Massoni fracasara.