El Intendente de Corcovado Ariel Molina fue denunciado en las últimas horas por instar a una familia a ocupar una vivienda privada. Esta situación se inscribe en una larga historia que protagoniza una familia de Corcovado integrada por la docentes Silvina Gutiérrez y Javier Villoldo empleado del Correo de la localidad.
En diálogo con Eqnotas.com, la docente indicó que hace 7 años comenzó un juicio civil dirigido hacia la Municipalidad de Corcovado y contra el propio intendente por “una cadena de errores en una casa del IPV» que fue construida por la municipalidad por obra delegada, que recibió “en disconformidad”.
Según señaló, presentaba algunos problemas de construcción relacionadas a las medidas. ”En las habitaciones no entra ni una cama de una plaza, no daban los metros cuadrados», explicó. Los vicios de construcción fueron acreditados en el desarrollo del juicio que en primera instancia le dio la razón a los propietarios.
Hace 15 días se dictó la sentencia del juicio civil iniciado, que se resolvió a su favor y se condenó al intendente Molina y a la Municipalidad. Esa sentencia fue apelada por los abogados de la municipalidad y el propio funcionario.
En ese momento, Silvina manifestó que “como familia recibieron el dictamen con felicidad” y con la esperanza e ilusión de comenzar con la casa. Sin embargo, relató lo que sucedió el sábado pasado.
En principio, explicó que cada fin de semana viaja a Esquel porque tiene una hija estudiando en la localidad. Pero este último, por razones laborales de su esposo, no pudieron viajar.
Cuando salía de un comercio de Corcovado “veo que en la vivienda que me adjudicaron habían cortinas, me asusté, fui a mi casa y llamé a mi marido”. Ante las circunstancias decidieron concurrir al lugar acompañados de la policía.
Al llegar, Silvina indicó que se encontró con un hombre que llevaba un escobillón para limpiar. En ese momento, le preguntaron qué hacía en el domicilio y el hombre manifestó que se le había vencido el alquiler del lugar en el que vivía y como no tenía a dónde ir, decidió ocupar la vivienda en cuestión.
Pero el hecho no quedó ahí.
Cuando ingresaron a la casa y se encontraron con un niño y una mujer, quien le pedía disculpas y le expresó que no sabía que era su casa, teniendo en cuenta que Silvina es conocida por muchos debido a su rol en la docencia. De hecho, Silvina Gutiérrez es la maestra del pequeño hijo de la familia que había ingresado a la casa.
En ese momento, la misma mujer le manifestó “yo fui enviada por el intendente” frente a todos los presentes. Según las declaraciones de Silvina, también le expresó que Molina fue a verlos al lugar donde estaba y les dijo que “vayan a tomar la vivienda porque hace años está desocupada y que el lunes les arreglarían la situación”.
“El asombro fue total”, sostuvo la docente, quien radicó la denuncia correspondiente por intento de usurpación. El testimonio de la mujer
A raíz de este hecho, Silvina señaló que hoy vive asustada por su familia y sus hijos “tengo miedo, vivo asustada por mi familia porque si Molina pudo hacer esto y se cree impune, es capaz de hacer otra cosa”.