Principio de mes y las familias salen a realizar las primeras compras para abastecer las alacenas, al menos con lo indispensable. En los supermercados ya es raro ver carros llenos, y en general la búsqueda de ofertas se enfatiza cada vez más. Los precios suben y los sueldos siguen sin dar abasto.
Buscando precios que se ajusten a las posibilidades y muchas veces priorizando productos de segunda marca, algunas de las familias avanzan con compras golondrinas, con lo justo y necesario que se va necesitando en el día a día; mientras que quienes cuentan con la posibilidad económica, tratan de comprar por mayor aquellos productos que se utilizan cotidianamente y que aumentan regularmente, como el aceite que actualmente según la marca puede valer entre $400 y $800 el litro, el kilo de harina que ronda entre los $200 y los $350, o la leche entera en caja que tiene un valor entre los $450 y los $490, según la marca.
Las verduras son uno de los gastos más significativos para las familias comodorenses
Ya el mes pasado, en el relevamiento realizado por el Observatorio de Economía, de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, se había manifestado que los productos del sector frutas y verduras representaban un 27% del total de la canasta básica de las familias comodorenses, lo que para julio representaba un monto mínimo aproximado de $33.354.
Lo básico que puede necesitar una familia sigue subiendo: por ejemplo, el kilo de zanahoria y el kilo de cebolla se encuentran alrededor de $400; el kilo de papa ya ronda los $800 en la mayoría de los comercios, aunque en ciudades como Buenos Aires ya superó los $1.000; el tomate redondo cercano a los $1.000. Otros productos como los morrones cuestan alrededor de $2.600 por kilo, el zapallo anco cerca de los $350 y el zapallito verde roza los $1.000. Los maples de huevos rondan los $3.000, aunque en algunos comercios se pueden encontrar ofertas llevando 2 unidades.
Por su parte, la venta de las frutas flaquea, ya que son consideradas como alimentos complementarios. Frente a ello, las ofertas por cantidad asoman las vidrieras con más recurrencia, por dos o tres kilos. Tanto el kilo de naranja como de mandarina se encuentran alrededor de $800, mientras que la manzana casi llega a los $1.200.
Según lo expresado en varios locales de la ciudad, los costos de estos alimentos seguirán variando. “Todas las semanas van variando los precios, tratamos de mantener pero va subiendo”, manifestaron en una verdulería de la zona sur.
En la misma línea, en otro local de la zona centro, sostuvieron: “La verdura subió toda, incluso la papa que acá la tratamos de mantener, pero sabemos que en otras ciudades ya aumentó”, sostuvo.
Los precios de la carne no se quedan atrás
De manera similar a las verduras sucede con los precios de las carnes y derivados, que para julio representaban un 26% de los gastos básicos, un estimado de $32.120 mensuales. Los cortes más básicos, que sirven para comidas diarias como el estofado, el guiso o la sopa, rondan entre los $2.600 y los $3.800. En las carnicerías, aunque expresan que las ventas más básicas se sostienen, notan que las familias se miden para no gastar de más.
Por las calles de Comodoro, el kilo de aguja o paleta puede encontrarse en oferta cerca de los $2.800; las carnes para milanesa como la nalga o la cuadrada entre los $3.800 y los $4.200. Una de las más buscadas y más económica, termina siendo la carne picada, que según sus variedades en común o especial ronda entre los $2.400 y $3.000. Frente a esto, surgen alternativas como la carne de cerdo que empieza a ser más solicitada.
Por su parte, encontrar la carne para el tradicional asado, si se quiere cuidar el bolsillo, requiere recorrer para buscar ofertas. En carnicerías conocidas, la tapa de asado o el corte americano por kilo puede llegar a salir hasta $3.500, el vacío supera los $4.000, mientras que el chorizo y la morcilla ronda los $3.300 el kilo.
Comercios céntricos se ven afectados por la poca circulación
A nivel local, sumado a la situación del país, los comercios de la zona céntrica se vieron sumamente afectados ante el desmoronamiento de la Ruta Nacional 3. Las verdulerías y carnicerías, a pesar de vender productos de primera necesidad, sostienen que las ventas han decaído en un 40%.
“El tema de los precios lo veníamos nivelando, pero todo se terminó de partir cuando pasó lo del camino, ahí tranquilamente bajaron un 40% las ventas. La gente misma nos dice que prefieren comprar en el barrio. Ahora con esto está más complicado y ya no tenemos una fecha de cobro”, expresaron desde un local que se dedica a la venta de frutas y verduras en la zona centro.
Para cocinar un guiso básico se requieren más de $3.000
El guiso es una de las comidas más tradicionales para la familia argentina, más en la región patagónica en donde el frío implica consumir mayores proteínas. Comprar los insumos necesarios representa un gasto que puede superar los $3.000 pesos de base.
A detalle, para el guiso más básico se requieren 2 cebollas, 2 zanahorias, 2 papas, puré de tomate, arroz, lentejas o fideos; también, si se prefiere y el bolsillo alcanza, un poco de carne.
Comprando lo justo y necesario para preparar este guiso se gastaría un aproximado de $3.000, considerando: alrededor de $350 en las cebollas y las zanahorias, y alrededor de $200 por las papas. En el puré de tomate, entre $330 y $400, según la marca. El paquete de arroz por kilo cuesta $750, estimando que se gastaría solo una parte se podría calcular un aproximado de $200; por otro lado, las lentejas por 400 gr., según su marca puede tener un valor entre los $750 y $850, calculando que para una comida se utilizaría la mitad, se estimaría alrededor de $400. Para sumarle la carne, por ejemplo, medio kilo de aguja podría conseguirse a $1.400.
Dicho valor, sería considerando las porciones necesarias para una comida. Además, sumando otros insumos, como condimentos y algunas otras verduras, como arvejas, cebollas de verdeo, zapallito verde o zapallo anco, se podrían llegar a sumar $1.000 más.
Ante lo sucedido, los comercios alertan por la situación y solicitan que se tomen medidas urgentes para prevenir el cierre de negocios.