América se niega a reconocer a Nicolás Maduro como presidente legítimo de Venezuela. A excepción de Cuba y Nicaragua, los únicos aliados del chavismo en la región, los presidentes de todo el continente dieron la espalda este viernes a Maduro en la ceremonia de investidura por negarse a presentar las actas que muestren su triunfo en las elecciones de julio, consideradas fraudulentas por gran parte de la comunidad internacional. La presencia del cubano Miguel Díaz-Canel y del nicaragüense Daniel Ortega en Caracas contrasta con la ausencia de los demás mandatarios regionales y con las críticas recibidas en las últimas 48 horas desde todos los rincones del continente.
Según MSN. Para Milei, Maduro ha transformado Venezuela en un “infierno en la tierra”. A través de un comunicado, instó a todos los gobiernos a exigir “el fin del régimen socialista que ha dejado a millones de venezolanos en la pobreza, exiliados o dependientes de las dádivas de la dictadura”. Este viernes, su jefe de Gabinete, Guillermo Francos, definió a Maduro como “un personaje caricaturesco” y aseguró que se ha sostenido en el cargo “imponiéndose por el miedo, la agresión, el asesinato y la cárcel”.
La presidenta peruana, Dina Boluarte, rechazó por “fraudulenta” la asunción de Maduro por un nuevo mandato de seis años. “El Gobierno del Perú lamenta y rechaza que Nicolás Maduro haya asumido fraudulentamente la presidencia de Venezuela. El Gobierno peruano no lo reconoce como presidente”, dijo Boluarte a través de un comunicado. La mandataria señaló que la voluntad popular es el “único origen legítimo del Gobierno” y, por tanto, el cargo corresponde a Edmundo González Urrutia, “a quien el Perú reconoce como presdiente electo de Venezuela”.
Las críticas contra el chavismo se redoblaron tras la detención y posterior liberación de la líder opositora María Corina Machado al abandonar la protesta contra Maduro en la que había participado después de pasar meses en la clandestinidad.