Las tres provincias firmaron un convenio histórico para coordinar recursos, capacitar brigadistas y reforzar la prevención de incendios forestales.
Las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut dieron un paso trascendental en materia de seguridad ambiental. Con la firma de un convenio interjurisdiccional, nació el Comando Unificado Regional de Manejo del Fuego, un esquema que permitirá coordinar recursos, entrenamientos y respuestas conjuntas para enfrentar los incendios forestales en la cordillera.
El acuerdo, según informó el Gobierno de Río Negro, llega tras una temporada crítica en la que los siniestros pusieron al límite los sistemas de emergencia y obligaron a evacuar a cientos de familias en la Patagonia.
El acto y los protagonistas
El lanzamiento del comando contó con la presencia del gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck; el mandatario de Chubut, Ignacio Torres; y la secretaria de Emergencias y Gestión de Riesgos de Neuquén, Luciana Ortiz Luna. También participaron el intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano, y la ex secretaria de Energía y Ambiente rionegrina, Andrea Confini, quien fue clave en las gestiones que hicieron posible este acuerdo.
Los funcionarios coincidieron en que el trabajo coordinado es esencial para proteger vidas, bienes y el ambiente ante escenarios cada vez más complejos de riesgo climático.
Un sistema integrado de prevención y combate
El convenio establece la creación de una mesa técnica-operativa permanente, capacitaciones conjuntas para brigadistas, un esquema coordinado de medios aéreos y protocolos de asistencia inmediata cuando un foco supere la capacidad de una sola provincia.
En total, las tres jurisdicciones dispondrán de unos 600 brigadistas movilizables según la magnitud de cada incendio. Neuquén avanza con la licitación de cuatro aeronaves, Chubut con su propio proceso de incorporación, y todas estarán disponibles para cualquier provincia que lo requiera.
El rol central de Río Negro
Río Negro será clave en el esquema gracias a la experiencia acumulada de su Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF), con bases operativas en Bariloche, El Bolsón y General Conesa.
Weretilneck confirmó la incorporación de 50 nuevos combatientes y el refuerzo de 100 brigadistas en la cordillera, en reemplazo de bajas por jubilación o renuncia. También anunció nuevas cámaras de detección desarrolladas por INVAP, un avión observador con tecnología infrarroja, camiones cisterna, maquinaria vial y drones policiales para monitoreo aéreo.
Reconocimiento a la solidaridad
El mandatario rionegrino dedicó parte de su mensaje a agradecer la colaboración de Chubut durante los recientes incendios en Mallín Ahogado:
“Quiero agradecer de corazón por la ayuda, tanto material como espiritual. Si no hubiese sido por la predisposición de todos los que hoy están aquí, las consecuencias hubiesen sido mucho más graves. Nos sentimos acompañados, cuidados y ayudados”, expresó.
Torres, por su parte, destacó la relevancia política del acuerdo:
“Este es un acto importante en lo operativo y también en lo político. Ante la falta de interés del Gobierno Nacional en la Patagonia, cuando trabajamos en conjunto logramos resultados. No podemos relativizar la importancia de invertir en prevención”, subrayó.
Ortiz Luna coincidió en remarcar la necesidad de anticiparse:
“Podemos llegar a tener incendios de magnitud altísima y es algo que debemos prever entre todas las provincias patagónicas. Lo importante es que el primer paso ya está dado: la decisión de trabajar coordinadamente”.
Con este convenio, Río Negro, Neuquén y Chubut inauguran una etapa de cooperación inédita para prevenir y combatir incendios forestales, en un contexto de creciente amenaza climática. La estrategia regional apunta a fortalecer la seguridad de las comunidades y a garantizar la preservación ambiental de la Patagonia.