El Gobierno de Israel aprobó un acuerdo inicial de paz con el grupo palestino Hamás, en un paso clave hacia el cese de hostilidades y el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos.
La decisión fue adoptada por el gabinete del primer ministro Benjamín Netanyahu tras una extensa reunión celebrada en Jerusalén.
Según informó la oficina del premier, el consenso alcanzado representa el “esquema base” del plan de pacificación impulsado por Estados Unidos, bajo la mediación directa del presidente Donald Trump. La información fue difundida por el medio alemán DW.
Un paso clave hacia el alto el fuego
El acuerdo aprobado contempla la liberación de todos los rehenes israelíes retenidos por Hamás y una retirada parcial del ejército israelí de la Franja de Gaza, después de dos años de enfrentamientos.
Si bien la declaración oficial se centró en la cuestión humanitaria, no detalló otros aspectos del plan propuesto por Washington, que busca poner fin definitivo al conflicto armado. Se espera que las próximas semanas sean determinantes para la implementación de los primeros pasos del pacto.
Ataques en medio de las negociaciones
Mientras el gabinete israelí debatía los términos del acuerdo, nuevos bombardeos fueron reportados en la Franja de Gaza, dejando decenas de víctimas y personas atrapadas bajo los escombros.
Estos ataques ocurrieron en paralelo al anuncio del acuerdo, generando dudas sobre el alcance real del alto el fuego. El plan de paz incluye interrogantes sobre el desarme de Hamás, el rol de las fuerzas israelíes y el futuro gobierno del enclave palestino.
Un conflicto que devastó Gaza
La guerra entre Israel y Hamás, iniciada tras el ataque del 7 de octubre de 2023, dejó decenas de miles de palestinos muertos, gran parte del territorio en ruinas y una crisis humanitaria sin precedentes.
El acuerdo propuesto se perfila como la primera oportunidad concreta de detener la violencia, aunque su cumplimiento dependerá de la cooperación efectiva de ambas partes y del monitoreo internacional.
Esperanza y cautela en Medio Oriente
A pesar de la incertidumbre, diplomáticos de varios países celebraron la aprobación del plan como un avance significativo hacia la paz regional. Sin embargo, analistas advirtieron que la implementación requerirá garantías sólidas y supervisión internacional para evitar nuevos enfrentamientos.
La comunidad internacional mira con atención los próximos pasos, mientras las víctimas del conflicto esperan que esta tregua marque el comienzo del fin de una guerra devastadora.