El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, salió ileso tras un ataque armado a su caravana en la provincia de Cañar, en medio de protestas indígenas contra su gobierno.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, resultó ileso tras un ataque armado a su caravana el martes 7 de octubre de 2025, en la provincia de Cañar, al sur del país.
El ataque ocurrió en el cantón El Tambo, cuando Noboa se dirigía a inaugurar una planta de tratamiento de aguas y supervisar obras de saneamiento. Según informó la ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, alrededor de 500 personas lanzaron piedras y dispararon contra los vehículos oficiales. «Aparecieron 500 personas y le estuvieron lanzando piedras (a la caravana) y, obviamente, también hay signos de bala en el carro del presidente», declaró Manzano a la prensa.
Videos difundidos por la Presidencia muestran la escena desde el interior de uno de los vehículos, donde se escuchan objetos chocando contra los vidrios y una voz que grita «agachen la cabeza». Desde el exterior, se observa a manifestantes, algunos con trajes tradicionales indígenas, lanzando piedras y palos mientras la caravana avanza escoltada por vehículos blindados y sirenas.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, tras el ataque a su caravana en la provincia de Cañar
A pesar del ataque, el presidente continuó con su agenda. En un acto público en Cuenca, Noboa rechazó el ataque y afirmó: «Esas agresiones no se aceptan en el nuevo Ecuador. La ley aplica para todos. No vamos a permitir que un poco de vándalos eviten que trabajemos por ustedes».
El gobierno presentó una denuncia por «tentativa de asesinato» contra Noboa y detuvo a cinco personas, quienes serán procesadas por terrorismo, delito que puede acarrear hasta 30 años de prisión. Desde el 22 de septiembre, el país enfrenta protestas lideradas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) en rechazo a la eliminación del subsidio al diésel, que incrementó el precio del combustible de 1,80 a 2,80 dólares por galón. Las manifestaciones han dejado un indígena fallecido por impactos de bala, alrededor de 150 heridos entre civiles, militares y policías, y más de un centenar de detenidos, según cifras oficiales y de organizaciones de derechos humanos.
El ataque a la caravana presidencial en Ecuador resalta la creciente tensión política y social en el país, marcada por protestas indígenas contra políticas gubernamentales. Aunque el presidente Noboa salió ileso, el incidente subraya los desafíos que enfrenta su administración en medio de un clima de descontento y movilización social, según informó DW.