La brasileña Fluxus apuesta a desarrollar Centenario y proyectos no convencionales en Vaca Muerta.
La petrolera brasileña Fluxus, recientemente adquirida por el Grupo J&F, desembarcó en Neuquén con un plan ambicioso: poner en valor el histórico yacimiento Centenario y lanzar un proyecto piloto en Vaca Muerta. La inversión inicial estimada oscila entre 70 y 100 millones de dólares, con el objetivo de demostrar el potencial de los recursos no convencionales en la región.
“Tenemos la intención de hacer pilotos para tener producción de petróleo”, explicó Ricardo Sabini, fundador de Fluxus y geólogo con amplia trayectoria. “Nuestra intención es hacer pilotos para demostrar el potencial de los no convencionales en el área, especialmente en el norte del bloque Centenario”, agregó, señalando que el éxito dependerá de la aprobación de la provincia de Neuquén.
Del pasado en Petrobras al respaldo del Grupo J&F
Sabini no es nuevo en la industria: fundó 3R Petroleum en Brasil, empresa que creció tras adquirir campos maduros a Petrobras. Ahora, con Fluxus y el respaldo del Grupo J&F, busca replicar ese modelo, pero con alcance regional y respaldo financiero significativo.
“La diferencia es que ahora no somos una startup: Fluxus tiene detrás a un grupo con capacidad financiera muy grande y con necesidades energéticas concretas”, afirmó Sabini. El Grupo J&F es propietario de JBS, líder mundial en producción de proteínas animales, y de Âmbar Energía, gran consumidora de gas.
Centenario: producción, recursos y compromiso ambiental
El campo Centenario, dentro de la ciudad de Neuquén, actualmente produce 810.000 metros cúbicos diarios de gas y 500 barriles de líquidos, con reservas 2P de 26 millones de barriles de petróleo equivalente. Sin embargo, lo más prometedor son los más de 200 millones de barriles en recursos contingentes (3C), mitad petróleo y mitad gas, según estimaciones de Fluxus.
Además de perforar nuevos pozos, la compañía se comprometió con la provincia a abandonar 70 pozos en siete años, reforzando la inversión social y ambiental en un bloque urbano. “Nos hemos comprometido con un programa importante de abandono de pozos, porque estamos dentro de la ciudad. Es una inversión social a lo largo de 7 años”, dijo Sabini.
El plan también contempla 30 millones de dólares para reactivar 54 pozos y optimizar la planta Turbo Expander de Centenario Centro, fundamental para la producción de líquidos y GLP.
El proyecto piloto en Vaca Muerta
Aunque Centenario estaba fuera de la ventana productiva, Fluxus lo considera ahora dentro de la ventana de petróleo de Vaca Muerta. El objetivo es iniciar un piloto en el norte del bloque y, si los resultados son positivos y cuentan con la aprobación provincial, escalar hacia un desarrollo mayor.
“Estamos en una zona muy periférica de Vaca Muerta. Si el piloto va bien y la provincia lo aprueba, vamos a activar inversiones muy importantes. Hoy creemos que vamos a invertir alrededor de 70 a 100 millones de dólares, pero si tenemos Vaca Muerta a full, va a ser mucho más que eso”, anticipó Sabini.
El desembarco en Argentina no es aislado: Fluxus también adquirió activos de Pluspetrol en Bolivia y analiza proyectos en Perú y Venezuela, con la meta de garantizar gas para las filiales del Grupo J&F en Brasil, según Más Energía.
En Neuquén, la estrategia combina producción, desarrollo no convencional y compromiso ambiental, posicionando a Centenario como un actor relevante dentro del mapa de Vaca Muerta.




