El presidente venezolano Nicolás Maduro respondió tras 60 horas de silencio al Nobel de Paz concedido a María Corina Machado.
Se refiriéndose a la opositora como «bruja demoníaca» en un discurso cargado de simbolismo y lenguaje beligerante.
Un Discurso que Combinó Insultos y Simbolismo
Según cables de la agencia Reuters, Maduro evitó mencionar directamente a Machado durante su intervención en el Día de la Resistencia Indígena, pero lanzó fuertes descalificaciones en su contra. El mandatario afirmó que «un 90% de la población repudia a la bruja demoníaca de la Sayona», utilizando una figura de la mitología andina para referirse a la galardonada con el Premio Nobel de Paz. El medio El País reportó que presentó el galardón como una «maniobra imperialista» y apeló a la «estirpe guerrera» de sus seguidores para pintar a la oposición como aliada de intervenciones extranjeras.
La Respuesta Militar ante el Reconocimiento Internacional
En lo que analistas de The Guardian interpretaron como una estrategia propagandística, Maduro ordenó acelerar la creación de una «Milicia Bolivariana Indígena» y propuso incluso la integración de milicias internacionalistas indígenas sudamericanas. Esta movilización militar fue presentada como un acto de defensa de la soberanía frente a lo que calificó como «amenazas externas», en evidente respuesta al reconocimiento internacional obtenido por la líder opositora.
El discurso del presidente venezolano mezcló la estigmatización personal -a través de insultos y referencias mitológicas- con acusaciones geopolíticas sobre el supuesto papel de Estados Unidos, buscando cohesionar a su base electoral y desviar la atención del histórico logro de Machado. La intervención evidencia la profunda polarización que vive Venezuela, donde un reconocimiento global es respondido con censura y movilización militar por parte del oficialismo. Información extraída del medio Diario sur.